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Una 'nueva mayoría' del PSOE de Vizcaya derrota a García Damborenea

La nueva mayoría del Partido Socialista de Euskadi (PSE-PSOE) en Vizcaya ha conseguido una amplia victoria en la elección de delegados para el congreso provincial extraordinario del próximo día 13. La corriente fiel al hasta ahora secretario general, Ricardo García Damborenea, había conseguido hasta ayer por la tarde poco más del 10% de los mandatos de los 4.012 militantes de base, mientras que la suma de oficialistas y críticos disidentes sumaba casi el 75%.La renuncia de García Damborenea a bajar a la base y hacer campaña para su reelección o al menos para explicar la crisis en el partido ha dejado en difícil situación a sus seguidores.

La relación de fuerzas tras la celebración de la mayor parte de las asambleas de agrupaciones locales era ayer, según fuentes de la nueva mayoría, de 446 mandatos para los partidarios de García Damborenea frente a 2.958 para el sector disidente de la direccion provincial. Este sector provocó la crisis con su dimisión y su retirada de confianza al secretario general.

Los dirigentes fieles a García Damborenea, huérfanos de la participación activa de su líder, han perdido enclaves con afiliación muy numerosa y considerados hasta ahora incondicionales, como Barakaldo, Portugalete y Basauri, en el cinturón industrial de Bilbao. Por el contrario, los fieles a García Damborenea han conseguido el apoyo de la agrupación de Algorta, tradicionalmente oficialista, donde está afiliado Luis Atienza, consejero de Economía del Gobierno vasco y mano derecha de Ramón Jáureguí en el PSE de Vizcaya.

Sistema mayoritario

La distribución de mandatos entre las dos corrientes no refleja el apoyo real de cada una. El sistema de elección de delegados es mayoritario, de modo que el total de votos de-cada agrupación es asignado a la candidatura ganadora, con independencia del apoyo recibido por las demás. La relación de fuerzas real entre ambas corrientes, críticos damboreneístas y oficialistas más críticos disidentes, se sitúa aproximadamente en torno al 30% para los primeros y el 70% para los segundos, según fuentes de éstos.La nueva mayoría no ha explicado todavía públicamente los motivos de su ruptura con el secretario general saliente ni la alternativa que presenta para la dirección del partido. De hecho, las asambleas se han convertido en un simple refrendo a la operación contra García Damborenea y se han celebrado sin ningún candidato claro a la secretaría general, al haber renunciado el saliente a dar la batalla y no haber presentado otro distinto los disidentes.

José Andrés Paul y Nicolás Redondo Terreros siguen siendo los dos candidatos con más posibilidades, a reserva de una operación de última hora para ofrecer a García Damborenea la continuidad. Tal ofrecimiento podría producirse siempre que aceptara las condiciones del aparato, una vez que éste ha demostrado su control de las bases.

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