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Entrevista:

Drnovsek: "El socialismo es compatible con el espíritu de empresa"

El próximo presidente de Yugoslavia analiza la necesidad de apertura económica

Janez Drnovsek, doctor en Economía, esloveno, de 39 años, será desde el 15 de mayo presidente de Yugoslavia. Encabezará durante un año la presidencia colectiva, compuesta de ocho miembros, pero permanecerá cinco años en la presidencia, puesto que los miembros para el órgano máximo del país se eligen cada quinquenio. Este año, por primera vez, dos repúblicas -Eslovenia y Montenegro- eligieron a sus representantes en las elecciones directas, por lo que Janez Drnovsek será el primer presidente yugoslavo popularmente elegido. Dos semanas antes de asumir el cargo, Drnovsek concedió una entrevista a EL PAÍS.

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Janez Drnovsek es una cara nueva en el escenario político yugoslavo. Hasta el 2 de abril, día de los comicios en Eslovenia, fue un hombre desconocido para la opinión pública yugoslava. Su carrera profesional ha girado en torno a la investigación académica y en la industria. Desde hace cinco años ha sido delegado de Eslovenia en la Skupstina (parlamento) federal. Su trabajo en la Skupstina representa su única experiencia política.Desenvuelto en el trato pero parco en las expresiones, Drnovsek explica que ha decidido lanzarse a la candidatura "porque no podía distanciarse de los problemas del país". Hombre introvertido pero de convicciones firmes, este economista, que frecuentemente resalta la eficacia como la máxima virtud, entiende que el mandato de un año, el modelo presidencial basado en la rotación, "tiene sus ventajas y desventajas. Es difícil realizar los programas políticos y económicos durante un año, pero es una de las maneras de arreglar las relaciones en un país pluriétnico. La igualdad está garantizada con la presidencia colectiva, pero no siempre la eficacia".

Drnovsek tiene varios proyectos para el futuro de Yugoslavia, y está decidido a realizarlos. Parece convencido de que los enfrentamientos políticos y étnicos actuales son de carácter pasajero. El futuro demostrará si sus previsiones son realistas o el producto del wishful thinking (lo deseado pese a todo).

Pregunta. ¿Cómo describiría usted la situación en el país?

Respuesta. La situación es difícil, sin duda alguna. Tenemos problemas económicos sin resolver: una inflación muy alta y una elevada deuda externa. La situación política es compleja: existen tensiones entre las diferentes repúblicas y etnias. En Kosovo tenemos estado de excepción. Soy consciente de que asumiré la presidencia en un momento crítico, en el período en que se decidirá el destino de Yugoslavia y su futuro desarrollo.

Uso de la razón

P. Consolidar la situación política es una precondición para el desarrollo económico. Usted hizo un llamamiento al uso de la razón en la política y pidió el cese de las tensiones. ¿Hay indicadores de que la razón haya comenzado a perfilarse en los debates políticos yugoslavos?R. Hay algunos, como por ejemplo el hecho de que yo ganara en las elecciones en Eslovenia con un programa político moderado en el que hice un llamamiento al uso de la razón. He recibido telegramas de apoyo de todo el país.

P. Cuando se escuchan las discusiones en los plenos de la Liga de los Comunistas de Yugoslavia (LCY) uno no tiene la impresión de que la razón reine en los debates.

R. Dije que nos encontrábamos en una situación política difícil. Sin embargo, pienso que en todas las repúblicas tenemos que ser responsables y saber que no podemos seguir enfrentados. Estoy convencido de que en todas las repúblicas hay gente responsable.

P. En Yugoslavia se reconoce la necesidad del pluralismo en la política. ¿Dónde está el límite del pluralismo?

R. La cuestión de los límites se presentaría tal vez si la LCY fuera afectada.

P. ¿Si la permanencia de la Liga fuera puesta en cuestión?

R. Sí. En este caso, el carácter del sistema político sería puesto en cuestión.

P. Entonces, ¿se tolerarán sólo aquellas agrupaciones políticas que no luchen por el poder?

R. Esto sería el límite desde el punto de vista de la LCY. El partido debería luchar por mantener su orientación socialista. La competencia de las ideas es positiva, y la LCY debería luchar por el poder, garantizar la eficacia.

P. Usted afirma que la salida de la crisis yugoslava se encuentra en la solución de los problemas económicos. ¿Está preparada la economía yugoslava para los desafíos del mercado?

R. No están todas las partes de Yugoslavia igualmente preparadas para afrontar la competencia del mercado económico. Pero en el pasado hemos constatado tantas veces que nuestra economía, integral o parcialmente, no estaba preparada para las leyes del mercado, y lo único que hicimos fue perpetuar la no preparación. Ahora tendremos que enfrentar los problemas que surgirán debido a la aplicación de los mecanismos del mercado.

P. ¿Qué sucederá?

R. La apertura del mercado llevará a la clausura o la disminución de muchas empresas. Debemos crear los instrumentos para garantizar la seguridad social de los obreros y evitar así las tensiones sociales y políticas. Tenemos que impulsar el desarrollo. Necesitamos nuevas inversiones: desde hace siete años no hay inversiones en Yugoslavia. Es obvio que no podemos sólo clausurar las empresas no rentables y no crear otras. Tenemos confianza en la creación de las empresas pequeñas y medianas, privadas y sociales (autogestionadas).

P. El economista Bogomir Kovac afirma que para la redefinición práctica y teórica del socialismo es importante comenzar con el proceso de reprivatización: devolver el poder económico y político al individuo.

Estimular la competencia

R. El proceso de la reprivatización ha comenzado y todavía tiene mucho campo de expansión. Por el momento, la propiedad social (modelo yugoslavo de propiedad autogestionada) es predominante. Queremos que el sector privado estimule la competencia y se la imponga al sector social, obligándole de esta manera a volverse eficaz. Deseamos activar los ahorros, tanto dentro del país como de los yugoslavos con residencia en el exterior.P. Los periódicos abundan con las historias acerca de los yugoslavos con residencia en el extranjero que regresan al país para invertir y la burocracia les bloquea.

R. Son problemas del comienzo. Hasta ahora no se ha abordado seriamente el problema de los empresarios privados.

P. Algunos economistas alegan que el espíritu empresarial es incompatible con el socialismo.

R. Yo creo que es compatible.

P. La revista especializada Ekonomska Politika ha publicado una serie de artículos en los que se alega que las empresas sociales (autogestionadas) no están en condiciones de respetar las leyes del mercado.

R. Eso es cierto. Por ello creo en la competición, que obligaría a estas empresas a adoptar una política distinta: no tendrán otra salida. Las leyes y las declaraciones políticas no pueden cambiar las viejas prácticas de las empresas: la competencia puede.

P. ¿Cuál es, según su opinión, la diferencia entre la economía de mercado en el socialismo y en el capitalismo?

R. Técnicamente no hay diferencias. Los mecanismos del mercado son iguales. Es un sistema que garantiza la máxima eficacia. No me pregunte, sin embargo, cuál es la diferencia entre el socialismo y el capitalismo.

Análisis

"Encargaré pronto la elaboración de un análisis de los problemas que tiene Yugoslavia en sus relaciones con las integraciones europeas y las posibilidades de acercamiento a las mismas. En mi programa electoral expuse que estaba a favor de la inclusión de Yugoslavia en la EFTA, y vía EFTA, en el mercado europeo. De esta manera podremos ver cuál es el lugar de Yugoslavia en Europa. En esta etapa, sin embargo, sería inmaduro hablar de la institucionalización de las relaciones con la Comunidad Europea", asegura.P. En su programa electoral, usted expuso que pediría la entrada de Yugoslavia en el Consejo de Europa. Esta organización tiene unas 126 convenciones: Yugoslavia ha firmado sólo algunas. ¿Le parece que la firma de la Convención sobre Protección de los Derechos Humanos y las Libertades Fundamentales es particularmente problemática?

R. Creo que las diferencias entre Yugoslavia y otros países no son tan grandes como parecen: Yugoslavia ha hecho mucho en el campo de los derechos humanos. Yo promoveré la adherencia formal de Yugoslavia al Consejo de Europa, como un acto formal que significará que Yugoslavia forma parte de Europa.

P. Entre algunos sectores existe el miedo a Europa. ¿Por qué?

R. Yo no tengo miedo. Creo que se trata de la inercia. Todas las integracioens europeas, hasta el Consejo de Europa, se han considerado durante años como las instituciones de la OTAN, y no eran compatibles con nuestra política de no alineación. Creo que las cosas han cambiado y que la EFTA y el Consejo de Europa no tienen un carácter político -son neutrales-, y la adherencia a ellas no significa la alianza con ningún bloque.

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