Movilizaciones

Hace algunos años, con ocasión de las primeras manifestaciones contra la reconversión naval en la bahía de Cádiz, Carlos Cano escribió aquello de: "Guardia, no tires pelotas, que pa pelotas Puerto Real". Algo después Puerto Real vivía días tremendamente conflictivos en los que algo parecido a la guerrilla urbana usurpaba el papel a la libertad de expresión, de movilización, al derecho a la huelga.Y el Gobierno lo arregló contratando la fabricación de buques para la compañía Del Monte, multinacional frutera que está esquilmando las tierras de los países tropicales y explotando a sus trabajadores para que nosotros nos deleitemos con babacos, kiwis... A los sindicatos, tan contrarios a estos usos empresariales, no les importó.

El día 20 de abril de 1988 (¿qué tendrá Hitler que ver?), alumnos del instituto de formación profesional Virgen del Carmen, en Puerto Real, con algún que otro añadido, rememoraban las actitudes de sus mayores -lo aprendieron bien- quemando coches y líneas telefónicas, cortando carreteras, destrozando semáforos...

Pedían mayor calidad de la enseñanza y más prácticas en las empresas. ¿Para qué, si ya las están haciendo? ¿Qué tendrán que decir ahora los sindicatos y todos aquellos que incitaban o veían con buenos ojos las movilizaciones anteriores?

Mientras ello sucedía, el consejo escolar del instituto estudiaba la introducción de la reforma de las enseñanzas medias. Extraiga usted las conclusiones oportunas.-