Un informe encargado por la Asamblea regional rechaza Getafe como aeropuerto civil
"No parece conveniente proponer a Getafé como segundo aeropuerto de Madrid", concluye un extenso informe encargado por la Dirección General de Transportes de la Consejería de Política Territorial de la Comunidad de Madrid. La posibilidad de convertir las pistas de la base militar de Getafe como aeropuerto civil para vuelos de capacidad reducida, planteada hace algo más de un año, fue muy bien acogida por los alcaldes de la zona. Grupos políticos, como el CDS, llegaron incluso a denunciar que este proyecto encubría una maniobra "para conseguir que la base de Torrejón de Ardoz permanezca a perpetuidad como objetivo estratégico de la Alianza Atlántica".
Las conclusiones del llamado Estudio de viabilidad de un aeropuerto civil en Getafe terminan con intensos debates de grupos políticos y asociaciones vecinales de los municipios de la zona. Eduardo Mangada, consejero de Política Territorial, reabrió el debate en el mes de junio. Mangada dijo que el aeropuerto de Getafé tenía un valor más simbólico que de realidad inmediata y que incluso podría haber reticencias a la hora de compatibilizar su uso militar y su uso civil para transporte de mercancías y viajeros a nivel comarcal. Estas reticencias, para el consejero, no vendrían de "las alturas políticas", sino "de quien tiene el chiringuito".De las alturas políticas, sin embargo, ha aterrizado este extenso informe en el que se descarta la relización de un aeropuerto civil en las instalaciones de Getafe y que fue encargado por la propia Comunidad.
El informe encargado por la Comunidad de Madrid matiza, sin embargo, que el suelo estudiado debería calificarse como "vinculado al sistema general del transporte aéreo", sin desecharse su utilización en el futuro. Además, "Construcciones Aeronaúticas S. A. (CASA) es un potencial usuario de mayor importancia en la utilización de Getafe".
Espacio aéreo
Los autores del informe, tras reconocer que el área de Madrid sufre "importantes problemas de disponibilidad de espacio aéreo", estiman que "si se se hiciera una importante inversión en equipos modernos para el control del tráfico aéreo, ésta resultaría rentable, ya que mediante ella sería posible ampliar la capacidad total del aeropuerto [Barajas]. Por el contrario, si esta inversión no se hiciera, sería preciso la construcción de una nueva pista".El tráfico aéreo de Barajas ha sufrido fluctuaciones importantes en los últimos diez años, razona el informe, "teniendo una deflexión importante a principios de los 80, subiendo espectacularmente a partir del 87, con unos incrementos semejantes a los experimentados en los años 60 y 70". Si se mantuviera esta tendencia, "la capacidad de Barajas, aún cuando estuviese equipado con un moderno sistema de de control de tráfico aéreo, podría acercarse a su techo a comienzos del próximo siglo".Por lo tanto, "si la demanda del transporte aéreo de Barajas para vuelos regulares puede ser afrontada adecuadamente con una sola pista, no parece que existan argumentos de peso para proponer la apertura de un nuevo aeropuerto omportante en la región". Se estima que el 30% de los viajeros que utilizan Barajas precisa el cambio de avión en el aeropuerto, y este dato supone uno de los mayores porcentajes del mundo. El estudio contempla otro aspecto negativo: "la orientación de su pista". prácticamente alineada con la de Barajas.La relativa ventaja de los viajeros que se beneficiarían de la localización geográfica de Getafe para desplazamientos, tiene como contrapartida la reducción de frecuencias, el tamaño de las aeronaves y el cambio de aviones en aeropuertos diferentes, asegura un informe que deben considerar ahora las autoridades autonómicas.
El estudio de viabilidad no olvida, tras una años de apasionados debates en la zona, la siguiente recomendación: "Sería prudente comenzar a tomar decisiones".
