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Serra y Obiols urgen la reconstrucción del diálogo entre el partido y la UGT

La búsqueda de la reconstrucción urgente del diálogo entre el partido y el Gobierno socialistas, por una parte, y los sindicatos -especialmente la UGT-, por la otra, constituyó la idea central de las intervenciones del ministro de Defensa, Narcís Serra, y del primer secretario del PSC, Raimon Obiols, en el mitin que los socialistas catalanes celebraron ayer en un cine de Barcelona.

Con las elecciones europeas como telón de fondo del acto, Serra se pronunció por "la necesidad de hacer un esfuerzo para reconstruir el diálogo con los sindicatos" y conseguir que la UGT vuelva a "corresponsabilizarse con la tarea del Gobierno socialista". Sin ello, advirtió el ministro, la continuidad del proyecto socialista en España encontrará serias dificultades.Serra fue recibido a su llegada al local donde se celebró el mitin por una veintena de jóvenes manifestantes que proclamaban la insumisión a la ley de Objeción de Conciencia. Mientras coreaban consignas contra el servicio militar y eran contenidos por un cordón policial, militantes socialistas entregaron rosas rojas a los objetores. Antes de la llegada de la policía, los manifestantes habían mantenido un enfrentamiento con militantes socialistas y miembros del servicio de seguridad del acto.

El ministro de Defensa señaló que el único límite para la reconstrucción del diálogo con las fuerzas sindicales "está en no poner en peligro el crecimiento económico, el progreso ni la modernización del país". Serra indicó que el fin de la concertación social y el enfrentamiento con los sindicatos -"en especial con la UGT", dijo- son los dos problemas más graves a los que se enfrenta "la continuidad de nuestro proyecto en el país", tras lo que destacó la necesidad de reflexionar y debatir sobre la huelga general del pasado 14 de diciembre -"que no es patrimonio de nadie", acotó- y de "abrir un proceso de adaptación a las nuevas situaciones" que se derivan de la transformación social en el país. El político socialista agregó que el Gobierno socialista nunca convocará unas elecciones en contra de los sindicatos".

El ministro de Defensa defendió el carácter "socialista" de la política económica del Gobierno, "claramente diferenciada de las opciones conservadoras de aquí y del resto de Europa". Serra apoyó el proceso de transformación económica y social en España impulsado por el Gobierno socialista, aunque reconoció que ese mismo proceso ha generado "elementos negativos".

El primer secretario del PSC, Raimon Obiols, argumentó, por su parte, que "es lógico" que el Gobierno y los sindicatos tengan discrepancias. "Eso no es algo insólito", afirmó, "pero no tienen por qué convertirse en hostilidad", e hizo un llamamiento a la reconstrucción de "los puentes de diálogo con la UGT".

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