El Gobierno polaco restringe las protestas tras los choques del sábado
Las autoridades polacas están haciendo frente con energía a la nueva oleada de protestas callejeras, conflictos laborales y radicalismo político que se ha desatado desde el viernes en diversas ciudades de Polonia.La policía ha detenido a 120 miembros de grupos anticomunistas que intentaban acudir a una reunión que iba a celebrarse en Jastrzebie, al sur del país, un día después de los violentos enfrentamientos registrados el sábado en las calles de Cracovia, que concluyeron con 39 policías ieridos y 24 manifestantes deteÍdos, según aseguraron fuentes ficiales.
Estos sucesos transcurren en un momento en que el Gobierno polaco y el sindicato ilegal Soliaridad se disponen a iniciar la cuarta semana de negociaciones para restaurar la legalidad al sindicato y llevar a cabo reformas económicas en Polonia.
El líder de Solidaridad, Lech Valesa, mostró ayer su preocuación por estos enfrentamienos, e hizo un llamamiento a los polacos a dar una oportunidad a la mesa de negociaciones. "Si la mesa fracasa, entonces, en abril o mayo, Walesa dará la señal para una huelga en Polonia", declaró el líder polaco. Las negociaciones entre el Gobierno y la posición se enfrentan en este momento, según fuentes de Solidaridad, a graves divergencias.
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