Uno de los tres jueces que firmó la sentencia de la minifalda dice que lo hizo sin leerla

El magistrado Alfonso Santisteban, el miembro más joven del tribunal de la Audiencia Provincial de Lérida que dictó la sentencia condenando a 40.000 pesetas de multa al empresario Jaume Lluís Fontanet por acosar sexualmente a su empleada María José L. A, de 17 años, expresó ayer su disconformidad con los argumentos utilizados por el magistrado ponente, Rodrigo Pita, en los que se señala que la supuesta minifalda que vestía la joven incitó al denunciado a cometer el delito. "Estoy de acuerdo con el fondo, es decir, con los fundamentos jurídicos en los que se basa la condena del procesado, pero no con la forma", señaló Santisteban, quien admitió haber firmado el fallo sin haberlo leído previamente.Alfonso Santisteban reconoció que los términos utilizados por su compañero de sala "están desfasados y no pueden reflejarse en una sentencia". El magistrado añadió que en este caso el ponente "se equivocó al recurrir a apreciaciones personales que han motivado la interpretación que después se ha hecho del fallo, convirtiéndose en fuente de polémica cuando lo realmente grave era el comportamiento del acusado".

"Que quede claro", afirmó Alfonso Santisteban, "que firmé la sentencia, como solemos hacer todos, sin leerla, porque es normal que nos fiemos del magistrado que la redacta. Si tuviéramos que repasar todas las sentencias que se dictan en esta Audiencia no acabaríamos, ya que somos pocos magistrados y el trabajo que tenemos cada día es excesivo".

Bronca y enfado

Por su parte, el empresario Jaume Lluís Fontanet declaró ayer a Radio Lleida.que el día de los hechos, el 3 de agosto de 1988, María José L. A., se presentó en la empresa Encuadernaciones Fontanet "con un jersey bastante escotado y pantalones cortos, cuando allí se utiliza una bata. Al final de la jornada laboral la llamé a las oficinas y le hice la observación de que las prendas que llevaba no eran las más adecuadas para trabajar". El empresario señaló: "Posiblemente, no aceptó la bronca y salió enfadada", y añadió que, probablemente, la joven pretendía con su denuncia ir al paro y cobrar una indemnización.

El padre de la joven, José López, manifestó que es lógico que el empresario se defienda, aunque rechazó la teoría del montaje económico.

Fuentes judiciales han asegurado que una de las trabajadoras de Encuadernaciones Fontanet, que compareció en el juicio como testigo del fiscal, declaró que el empresario también intentó abusar de ella. Sin embargo, esta trabajadora firmó hace dos días el comunicado de los empleados de la empresa en defensa de su jefe.

Por otra parte, las seis diputadas socialistas en el Parlament de Catalunya se han dirigido al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y al fiscal general del

Estado, Javier Moscoso, para que investiguen el contenido de la sentencia.