El Consejo Superior de Deportes ha aconsejajdo a Jesús Gil que presente su dimisión

J. DAMIÁN GONZÁLEZ El Consejo Superior de Deportes, a través de su director general, Rafael Cortés Elvira, ha aconsejado a Jesús Gil que sería "tan prudente como necesaria" su dimisión como presidente del Atlético de Madrid. La Audiencia Provincial de Madrid ha confirmado un nuevo auto de procesamiento contra Gil, esta vez por el posible delito de "injurias y calumnias" contra Mariano Rubio, gobernador del Banco de España. El Atlético sigue sin poder frenar la subasta de varios de sus bienes, como los trofeos y la iluminación del estadio Vicente Calderón, prevista para el 16 de marzo por impagos a la Seguridad Social, y miembros de un novimiento de oposición se reúnen mañana para estudiar una estrategia contra Gil.

El Consejo Superior de Deportes no tiene potestad ni autoridad legal para modificar la situación de ninguna entidad de derecho privado, como son los clubes de fútbol cuyos presidentes son elegidos democráticamente por sus socios. Sin embargo, ante las recientes llamadas telefónicas de Jesús Gil a altos cargos de este organismo, interesándose por la opinión del Consejo acerca de la dificil coyuntura que atraviesa el Atlético y las posibles salidas a la crisis generada por sus continuas actuaciones conflictivas, la respuesta del director general, Rafael Cortés Elvira, ha sido tajante: "Lo mejor es una razonable dimisión".Fuentes del CSD confirma ron también la preocupación existente por la auditoría presentada recientemente por Gil, al que se le pidieron numerosas ampliaciones. Estas aclaraciones deberían estar acompañadas por el sello oficial del colegio de censores jurados de cuentas, ante la "confusión y falta de datos" que hacían imposible un conocimiento exacto de la grave situación económica del club, cuyo endeudamiento ha aumentado notablemente -más de 600 millones- en el último año de mandato de Gil.

En el CSD se esperaban esas aclaraciones para este fin de semana, aunque será difícil aunar criterios ante las contradicciones del presidente del Atlético en lo referente, entre otras cosas, a los derechos sobre los jugadores de la plantilla. En la auditoría figuraba una certificación del secretario de la junta, Luis Rodríguez, según la cuál los fichajes de la época de Gil eran propiedad del presidente, quien reiteró en declaraciones a este periódico que el dinero que sacase de posteriores traspasos iría a su cuenta personal -cuatro de ellas figuran a su nombre y están domiciliadas en el club-. Sin embargo, días atrás Gil rectificó en sentido contrario ante los expertos económicos de la Liga de Clubes y del propio CSD, y presentó incluso un documento en el que se decía que los fútbolistas pertenecían al club.

Mariano Rubio

Fuentes de la oposición -un numeroso grupo se reúne mafiaría para estudiar ya una estrategia a corto plazo contra el actual presidente-, indicaron que la situación del Atlético es "insostenible por las continuas polémicas de Gil".

Precisamente ayer se abrió un nuevo frente jurídico contra el presidente del Atlético, al confirmar la sección segunda de la Audiencia Provincial de Madrid el auto de procesamiento contra Gil por los posibles delitos de "injurias y calumnias graves" contra Mariano Rubio, gobernador del Banco de España. Gil declaró la pasada semana ante el juzgado por un auto de características similares presentado por Ramón Mendoza y Manuel Fernández Trigo, presidente y gerente del Real Madrid, respectivamente, a quienes Gil acusó de ser los inductores del saqueo de su finca de Valdeolivas.

El auto de procesamiento contra Gil por sus declaraciones sobre Mariano Rubio obedece a las manifestaciones que realizó en diciembre de 1987, entre otras las siguientes: "Mariano Rubio está colapsando mis operaciones financieras y de crédito y ha hecho de mí su segundo Ruiz-Mateos. Su influencia llega a los medios de comunicación. Mariano Rubio es el cáncer de la economía, tiene la mano muy larga, pero a mí no me va a echar del país, en todo caso seré yo quien le eche. Algunos han resuelto las crisis bancarias de este país de forma peculiar; que si éste es amigo de la señora de Mariano Rubio y cosas así. Cuando hablo tengo datos y podéis ir a verme a Carabanchel, porque estoy dispuesto a dirigir al Atlético desde allí".

En los áltimos meses, Gil ha recibido 22 sentencias en contra y ninguna a favor en sus numerosos peitos con los futbolistas y empleados que ha expulsado del club.