Sargentos menos 'chusqueros'
En EL PAÍS del sábado día 28 viene entrevistado el abogado y vocero de la coalición HB Txema Montero, el cual, a una pregunta de la periodista, emite una respuesta que requiere ciertas matizaciones.Efectivamente, señor Montero, los que tienen las armas no son sargentos chusqueros. Hasta ahí podíamos llegar. Con este aserto ha desvelado usted uno de los grandes enigmas de la humanidad. Tampoco, por cierto, se encuentra en texto o diccionario alguno que sargento sea sinónimo de asesino. Demos la terminología pertinente y adecuada a cada término, y así nos entenderemos todos mejor.
Verá: aunque usted parece tener sus dudas, los sargentos sí que entienden discursos políticos, y de otras cuestiones, también; entienden, y no le quepa la menor duda, de sus obligaciones y misiones como miembros de una institución perfectamente ubicada y definida dentro del texto constitucional y otras leyes del Estado. Entienden perfectamente que son depositarios de los medios y de la fuerza que la sociedad ha delegado en ellos, siendo responsables ante esa misma sociedad del uso y empleo que de ellos hagan. Lo que está claro que no entienden es esa otra clase de discurso político del tiro en la, nuea, la extorsión, el coche bomba y el asesinato indiscriminado (ajusticiamientos); ni lo entien deri ni lo comprenden, no precisaniente por ignorancia (que usted supone), sino porque es muy difícil comprender tanta irracionalidad asesina por mucho que ustedes lo traten de explicar en campañas tautológicas.
En cuanto al término chusqueros, hombre, señor Montero, que los tiempos y las circunstancias han cambiado; que sí, hombre, que sí, que usted sabe que es verdad, aunque no quiera o no pueda reconocerlo públicamente, y que los sueldos (como los de cualquier otro trabajador) son tan justitos que en el pasado a lo mejor se han tenido que comer chuscos, y en el futuro, para ajustar el presupuesto familiar, pues tienen que volver a comerlos.-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.