Industrialismo destructor
Soy lector habitual de este periódico, pero el domingo no lo compro. No me interesan los suplementos y como no se me vende sin ellos, me quedo ese día sin diario.Pero hay otra razón por la que dejo de comprarlo y esta razón me provoca destemplanza, inquietud y pena. Se trata de esa proliferación de suplementos, en este como en todos los periódicos; mientras nos es dado leer artículos sobre inquietantes desequilibrios ecológicos que nos afectan y nos afectarán cada vez más y peor todavía a nuestros hijos, los diarios en general vais dando cuerda a los comerciantes del papel, que, junto con los del mueble y la madera y con la bendición de los tecnócratas brasileños, están arrasando el bosque amazónico y por consiguiente la fuente regeneradora de la cuarta parte del oxígeno contenido en el planeta.
¿Qué sentido tiene -que no
sea el estrictamente comercial- el suplemento al que llamáis Estilo, absolutamente dedicado a los papanatas? ¿Y cuál es El País Semanal con esos alardes publicitarios?¿No piensa nunca, señor director -por otra parte-, en eso que Baudrillard dice respecto a que la comunicación ofrece a los ciudadanos una cantidad de material que muy bien puede acabar produciendo la asfixia de la sociedad? Juan Luis Cebrián, siendo presidente del Instituto Internacional de Prensa, al clausurar la asamblea de esta organización, habida el día 14 de mayo de 1986, recalcó "la nueva y profunda preocupacíón por el medio ambiente y la ecología que las sesiones de trabajo habían puesto de manifiesto" (EL PAÍS, 18-5-1986). En la misma asamblea un verde afirmó: " La Prensa occidental es prisionera de los intereses del industrialismo destructor". Fue escuchado con atención y sus propuestas y advertencias sirvieron de base para esbozar futuras pautas informativas (EL PAÍS, misma fecha).-
abogado. .
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.