Cautela del Gobierno y de los partidos vascos
Todos los representantes del arco político parlamentario del País Vasco consultados nada más conocer la noticia de la ampliación del plazo de la tregua ofrecida por ETA se mostraron escépticos y cautelosos.También el subsecretario de la oficina del Portavoz del Gobierno, Miguel Gil, suscribía esta línea de cautela. "Tenemos que estudiar esta tregua con la misma prudencia que hasta ahora", al tiempo que reiteró su negativa a ofrecer otra valoración que la ya ofrecida en su día por el presidente Felipe González: "siempre es positivo que dejen de matar".
En el domicilio del eurodiputado de Herri Batasuna Txema Montero nadie respondía al teléfono. Sí respondió el abogado de HB, Iñaki Esnaola, que aseguró que no conocía la noticia. "Prefiero, en consecuencia, abstenerme de hacer valoraciones hasta que no haya leído el contenido del comunicado de ETA. Si ETA habla de distensión, ya es un matiz. Pero lo leeremos y, luego, ya hablaremos".
Por su parte, el vicepresidente del Gobierno vasco, el socialista Ramón Jáuregui declaraba: "Dos meses más de plazo sin atentados terroristas me parece una buena noticia. Aunque el hecho pueda resultar espectacular sigo manifestando mi escepticismo por lo menos". "Tengo la impresión de que quiere una mesa de negociación política, en Argelia, con el Gobierno español sobre una serie de reivindicaciones que han sido resueltas por la mayoría democrática vasca. Eso no puede ser ni siquiera objeto de discusión y tengo la impresión de que este período va a fracasar. Ojalá me equivoque y se pueda resolver esta página tan triste de nuestra historia", agregó Jaúregui.
El máximo dirigente del PNV, Xabier Arzalluz, acogió el anuncio de la tregua sin entusiasmo. "Debemos estar expectantes", dijo "ante este nuevo plazo y con la debida cautela ante operaciones que están queriendo dar a entender que ETA nos está perdonando la vida".
Gato y ratón
En opinión de Kepa Aulestia, secretario de Euskadiko Ezkerra, "podemos estar asistiendo al juego del gato y el ratón. Todo esto iría en contra de la paz. La cautela en estos momentos tiene que ser máxima y la responsabilidad que debe asumir el Gobierno central está en límite de su propio papel".Por último el representante de Eusko Alkartasuna, Joseba Azkárraga, juzgó "muy positiva" la ampliación de la tregua, que aseguró que no le había pillado de sorpresa. "Es importante que, por dos meses más ETA deje de matar, con la esperanza de que sea una fórmula definitiva. En estos momentos, la responsabilidad no sólo es de ETA, también es del Gobierno español".
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