_
_
_
_

Polonia permitirá gradualmente el pluralismo sindical

El pleno del Partido Obrero Unificado de Polonia (POUP, comunista) aprobó ayer una resolución que permitirá el pluralismo sindical y la legalización gradual de Solidaridad, y un voto de confianza al máximo dirigente polaco, general Wojciech Jaruzelski. Para la aprobación del documento, en la renión que concluyó en la madrugada de ayer y cuyo contenido se ha mantenido en secreto, fue necesaria una intervención en tonos dramáticos del primer ministro.

La intervención de Mieczyslaw Rakowski y la votación de la moción de confianza para la dirección del partido, fue una forma de presionar a los miembros del Comité Central contrarios en su mayoría a la conciliación con la oposición política.Anoche se esperaba una reunión de los líderes y asesores de Solidaridad del entorno de Lech Walesa para presentar una postura común ante el documento aprobado por el Comité Central del POUP.

En el documento del partido sobre el pluralismo sindical y político, cuyo contenido no había sido difundido hasta las primeras horas de la noche de ayer, según todos los indicios se exige al ilegal sindicato Solidaridad su integración en el sistema socialista, el distanciamiento de las fracciones "extremistas" de la oposición y el cese e la financiación desde el extranjero.

Mesa redonda

De mostrarse Solaridad dispuesto a aceptar estas condiciones, podría iniciarse el proceso negociador conocido generalmente como "la mesa redonda", en cuyo marco se determinarían los procedimientos y el calendario del paulatino retorno al pluralismo sindical en Polonia. Según dijo el martes el primer ministro Rakowski, tal proceso de construcción de Solidaridad podría durar dos años y constituiría un período de prueba para ver si el sindicato está dispuesto a colaborar con las autoridades para vencer los problemas económicos.La mesa redonda quedó paralizada en octubre pasado cuando, pocos días antes del comienzo de las negociaciones, el máximo dirigente polaco, general Wojciech Jaruzelski, condicionó la relegalización del sindicato a la mejora de la si tuación económica de Polonia difícil de augurar en los próximos años.

A partir de entonces, Solidaridad se negó a negociar con el Gobierno, sin una declaración de intenciones por su parte que dejara claro su disposición a aceptar el pluralismo sindical. El desarrollo del pleno, presentado con bastante amplitud por los medios oficiales polacos, demostró la brecha existente entre el buró político y los pocos intelectuales del comité central deseosos de llevar a cabo cambios necesarios para que, según dijo Rakowski, "el socialismo no pase a la historia como un experimento malogrado". Por otro lado, el núcleo obrero del Comité Central, se muestra reacio a las transformaciones y horrorizado ante la perspectiva de enfrentarse de nuevo con los enérgicos jóvenes líderes sindicales, a quienes barrió de las empresas el Ejército polaco hace siete años en vista de la impotencia política del partido.

Condiciones difíciles

A juzgar por los comentarios de la Prensa polaca, el buró político tuvo que recurrir, en una sesión a puerta cerrada celebrada en la noche del martes al miércoles, a la inusitada medida de presentar su dimisión para obligar a los miembros del Comité Central a aprobar el documento que les había !ido presentado.En la votación de la "moción de confianza" para la dirección encabezada por el general Wcjciech Jaruzelski ha habido cuatro abstenciones. El Comité Central cuenta con 230 miembros.

Ayer por la noche se esperaba asimismo una primera reacción de los líderes de Solidaridad del entorno de Lech Walesa, a quienes puede resultar difícil aceptar las condiciones impuestas por el Comité Central, sobre todo en vista del reciente cisma de un grupo de sindicalistas radicales, ya muy críticos con Walesa por su política "demasiado conciliadora frente a los comunistas".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_