Avance con cierre dudoso
La jornada de apertura semanal, pese a la subida de casi tres puntos, ha sido un modelo de inercia, en el que la simple constatación de la presencia de algunas partidas compradoras procedentes del extranjero ha sido capaz de animar a la barandilla a entrar a unos precios que ya considera altos. Algunas realizaciones de beneficios han puesto la lógica nota de precaución en medio de unas alzas que a la mayoría se les antojan demasiado rápidas, dadas las circunstancias. El ambiente del viernes pasado ha influido en este comportamiento de los inversores.Avances exagerados y recortes del mismo tono le han dado a esta sesión un ambiente atractivo en el que los más prudentes han tratado de retirarse y aquellos que quisieron comprar por lo mejor lo han hecho muy por encima de la aparente realidad del mercado. En el caso de Urbis, por ejemplo, hubo quien compró al 620%, con un cambio precedente del 520% y un cierre al 575%, todo un abanico de posibilidades que sirve para recordar a los inversores que conviene seguir limitando el precio de las órdenes.
El sector de constructoras, cementeras e inmobiliarias ha sido una vez más el favorito del dinero, y se acerca ya al 600% , tras un avance de 16,5 puntos. Los otros grupos industriales también fueron de los que despertaron el interés de los inversores y sus avances, aunque más moderados, destacaron sobre el resto del mercado. Todo quedaba pendiente del sector bancario que, esta vez, se vio envuelto en la dinámica del mercado y aportó parte de su peso para que el índice general se situara por encima del 238%, algo que nadie se atrevía a pensar hace tan solo una semana.
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