La Cruz Roja no pudo atender a un anciano que le donó 600 millones

Los familiares de un anciano almeriense, que murió tras haber sufrido una fractura de pubis, han expresado sus quejas a los responsables del hospital de la Cruz Roja de Almería, ya que el herido, que había donado 600 millones de pesetas a la institución, no pudo ser atendido en ese centro, según publicó ayer el diario almeriense La Crónica del Sur.

José Iruela López, de 85 años, sufrió una caída que le ocasionó una fractura de pubis, por lo que fue trasladado al centro que la Cruz Roja tiene en la carretera de Ronda, en Almería.

Los facultativos de ese centro alegaron que carecían de los medios adecuados para atender la fractura y aconsejaron su ingreso en el hospital Torrecárdenas, de la Seguridad Social.

A los 10 días de su ingreso en este centro, el anciano falleció a causa de las heridas que se produjo en la caída. Posteriormente, se comprobó que José Iruela había dejado en su testamento diferentes inmuebles a la Cruz Roja, valorados en unos 600 millones de pesetas.

Por otra parte, el secretario provincial de la Cruz Roja en Almería, José Luis Montero, declaró que el centro al que fue trasladado el anciano carece de los medios y personal adecuados para atender ese tipo de fracturas.