Francisco Mir: "No nos perdimos, tan sólo nos equivocamos de ruta por culpa del compás"

Francisco Mir, miembro del grupo El Tricicle, a quien se dio por desaparecido el viernes en Libia, apareció por sus propios medios en la madrugada del lunes en Dirku (Níger), donde pernoctaba la caravana del Rally París-Dakar. Llegó en perfecto estado junto a su compañero, Santiago Neira, y tranquilo: "¿Que nos estaban buscando? ¿Para qué? Nunca nos perdimos. Sólo nos equivocamos de ruta por culpa del compás y en salir tardamos dos días". Ahora se disponen a seguir hasta Dakar, ayudando a Joan Gracia, otro de los componentes de El Tricicle, que no ha sufrido ningún percance.

Según el relato de Mir, aunque ha perdido algo la noción del tiempo, el viernes, cuando había que cruzar Libia de Oeste a Sureste, entre Ghadames y Sabha, llegó el momento, en Dirj, a poco de salir, en que había que coger la dirección buena. Mir y Neira fijaron el compás e iniciaron la travesía de un desierto de tierra dura. El compás sufría un error de 30 grados 31 siguieron rumbo Sur en lugar de Sureste. Al atardecer, al entrar en una zona de dunas que no estaba previsto pasar, comenzaron a dudar. Les despistaba que hubiera algunas balizas que querían indicar que eso era una pista. Ya de noche, decidieron dar la vuelta. Se encontraron un camión del rally, cuyo conductor les aseguró que volvieran a dar la vuelta, que iban bien.A las pocas horas, tornaron a convencerse de que seguían un camino equivocado. Volvieron sobre sus pasos y acamparon. "La desilusión fue no ver las estrellas. Dicen que la noche es preciosa en el desierto, pero estaba nublado. Hasta lloviznó algo", cuenta Mir como única anécdota de su aventura. Al amanecer, ya estaban de nuevo en ruta y, cuando regresaron a Dirj, tomaron la carretera que, bordeando el desierto, a través de 1.200 kilómetros, llega a Sabha. Desde allí siguieron el mismo camino del rally para tomar contacto con la caravana ya sin sufrir ningún despiste.

Cuando llegaron a Tumu, el término de la etapa del sábado, los coches ya habían salido. Siguieron viajando y el enlace lograron hacerlo en Dirku, ya en Níger, a donde llegaron justamente a las tres de la madrugada del lunes.

"Lo peor fueron tantas horas seguidas en el coche", cuenta Mir; "por lo demás, estamos tan tranquilos que seguimos dispuestos a llegar hasta Dakar porque la aventura, que es de lo que se trata, continúa tanto fuera como dentro de la competición. Ayudaremos en todo lo que podamos a Gracia y, por lo pronto, ya le hemos dejado nuestras ruedas".

El rally, mientras tanto, con tinúa su marcha y ayer atravesó una de las zonas más dificiles, el desierto del Teneré, las tres cuartas partes del territorio español.

La travesía se inició en Dirku, cuyo desierto permanece todavía sembrado de espoletas de granadas francesas y barricadas de la II Guerra Mundial, y terminó en Termit-Kabul. El recorrido, a través de múltiples cordilleras de dunas, hubo que hacerlo a base de pura orientación, ya que no existía ninguna pista ni baliza en los 582 kilómetros de la etapa. Los participantes llevaban aparatos de navegación para poder llegar a puerto, como si de una regata oceánica se tratara. Una vez más, la caravana que sigue el rally perdió contacto con ellos, ya que fue desviada a Agadez, al encontrarse la aldea de Termit-Kabul incomunicada.

Tambay y Picco

La etapa fue ganada por Patrick Tambay (Mitsubishi), ex piloto francés de Fórmula 1, en coches, y por el italiano Franco Picco (Yamaha), en motos (5.29.14 horas), categoría en la que Fernando Gil se vio obligado a abandonar al resentirse de una lesión en la mano izquierda, de la que había sido operado hace dos meses, y Carlos Mas (Yamaha), undécimo ayer a 1.32.26 horas de Picco, es el séptimo en la clasificación general, a 2.03.00 horas del propio Picco, que precede al francés Lalay (Honda) en 53.45 minutos y al también italiano Terruzzi (Cagiva) en 1.15.57 horas, en tanto que los franceses Ciryl Neveu (Yamaha) y Stephan Peterhansel (Yamaha) sufrieron sendas caídas que les han supuesto la pérdida de dos horas. El belga Jacky Ickx (Peugeot) es el líder en coches, seguido del finlandés Ari Vatanen (Peugeot), a 4.17 minutos, y de otro francés, Patrick Zaniroli (Lange Rover), a 2.01.04 horas.

La pareja Hernández y Fernández, quienes han adquirido cierta popularidad porque realizan todas las etapas juntos, cada uno en su moto, se disolvió, aunque, no oficialmente. Hernández tiene una clavícula lastimada y ayer le sustituyó uno de los mecánicos de su equipo.