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10.000 familias sion recursos amiardan una vivienda de la Administracion madrileña

Juan Antonio Carbajo

Diez mil familias sin recursos aguardan la concesión de una vivienda por parte de la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid. IA lista de espera se ha incrementado con 4.000 solicitudes a lo largo de 1988. Ambas administraciones iniciaron durante el presente ejercicio la construcción de casi 6.000 viviendas públicas, 1.000 más de las contempladas en el Plan Cuatrienal de Vivienda, que prevé la terminación de 16.738 nuevos pisos hasta 1991.

La Comunidad de Madrid ha entregado este año un total de 5.265 viviendas públicas. De esta cantidad, sólo 863 se han adjudicado a las personas que conforman la lista de espera del Instituto de la Vivienda de Madrid (Ivima), cuyo número rondará las 10.000 personas al cierre del balance de este año, según declaró ayer el director-gerente de esta empresa de la Comunidad de Madrid, Miguel Ángel Pascual. Cada mes, la Administración recibe entre 300 y 400 solicitudes de viviendas.El realojamiento de las familias afectadas por los proyectos de remodelación de barrios y bolsas de pobreza ha provocado que el 80% de las viviendas entregadas durante 1988 tuvieran como destinatarios a las personas afectadas por estos planes. Todavía están pendientes de realojar más de 7.000 personas. "Estos proyectos absorben buena parte de nuestro esfuerzo, a pesar de que la Comunidad destina el 40% de sus inversiones a la construcción de viviendas sociales", afirmó Pascual.

El gerente del Ivima dijo que es alarmante el descenso de la participación de los promotores privados en el desarrollo de los programas públicos de vivienda. "Cada vez se presentan menos empresas a las adjudicaciones, y aquellas que lo hacen suelen ofertar precios superiores a los establecidos en el presupuesto inicial". En 1988 se pusieron a la venta 7.153 viviendas protegidas construidas por promotores privados.

Rejuvenecer la ciudad

El gerente del Ivima explicó que a partir del próximo año se va a atender a un sector de la población que por sus condiciones económicas sobrepasa el baremo máximo para acceder en la actualidad a una vivienda pública, pero que tampoco tienen ingresos suficientes como para poder adquirir una vivienda en el mercado libre inmobiliario. "Son, sobre todo, aquellos jóvenes con ingresos equivalentes a los proporcionados por percepciones comprendidas entre dos y cuatro veces el salario mínimo interprofesional (44.040 pesetas) y que nunca han tenido vivienda en propiedad", explicó Pascual.Para atender a esta demanda, el próximo año se iniciarán 6.000 viviendas en Palomeras (Vallecas) y se procederá a la expropiación de suelo suficiente en Moratalaz para construir en el futuro otras 6.000 viviendas. Este plan entra dentro de la filosofía que el consejero de Política Territorial, Eduardo Mangada, quiere poner en marcha para intentar frenar la progresiva huida a la periferia de miles de jóvenes matrimonios que no pueden acceder a una vivienda en propiedad en la capital. "Para estos proyectos, el Ivima pretende establecer una política de apoyo a entidades sociales sin ánimo de lucro o a cooperativas que puedan construir viviendas privadas, pero con precio tasado, para que estén al alcance de estos sectores ciudadanos que quedan fuera de juego", afirmó Pascual

En 1988, según los datos del Ivima, se han construido todos los pisos previstos en el Plan Cuatrienal más otros 1.000 que quedaron pendientes en 1987. Para el próximo año, el Ivima tiene la intención de iniciar 3.685 nuevas viviendas públicas y ad judicar las 3.111 que se iniciaron a finales de 1986 y principios de 1987. Afirmó también que, por primera vez, la Administración hará viviendas de promoción pública en Pozuelo y en Majadahonda.

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