La lucha por un mercado

La guerra comercial y política destacada por la modernización de los 24 viejos Mirage 3 españoles ha tenido unas fuertes repercusiones no sólo en la industria nacional sino también en las relaciones exterior es con Francia e Israel. Con la vista en el futuro, todos los implicados miraban el amplio negocio abierto: la modernización de los 1.200 Mirage 3 que hoy vuelan en el mundo.En España, las tensiones entre CASA y Ceselsa -empresa pública y privada- se saldó cuando el Gobierno exigió una amplia participación de la empresa pública en el negocio. Francia e Israel tampoco escatimaron presiones a la hora de favorecer sus intereses, concretados en las ofertas de CASA y Ceselsa, respectivamente.

Y es que, hasta ahora, sólo Israel tiene experiencia en modernizar ese avión (en Suráfrica y Chile), pero ello es posible porque un agente secreto israelí consiguió ilegalmente en 1968 toda la documentación sobre el Mirage 3. Por ello, Francia advirtió que no consentiría un amplio beneficio de Israel en el programa español.

La víctima real de esas tensiones ha sido el Ejército del Aire, que ha visto cómo se ha retrasado año y medio la modernización de sus 24 aviones con base en Manises (Valencia).