El obispo de Rímini prohíbe celebrar la misa del gallo en una discoteca

No habrá misa de Nochebuena en la famosa discoteca El Otro Mundo, de Rímini, la más original del país, frecuentada por el vicepresidente del Gobierno, el socialista Gianni de Michelis. El obispo de Ravenna, Ersilio Tonini, que gobierna actualmente la sede vacante del obispado de Rímini, ha negado. su nihil obstat tras habérselo pensado mucho.

La idea de celebrar la misa de Nochebuena en la discoteca más famosa de la importante ciudad balnearia de la costa adriática antes de que se desencadenasen los bailes rock, que suelen durar hasta el alba, había sido concebida por el sacerdote Giorgio Benzi, que trabaja en la recuperación de mendigos y drogadictos de la ciudad, y por el propietario de la discoteca, Piero Bevitore, quien se había comprometido a entregar al sacerdote, para sus marginados, la mitad de la recaudación de aquella noche.

La escenografía es espectacular en la citada discoteca. Seis rayos láser se entrecruzan sobre los cuerpos de los jóvenes que bailan. Del suelo surge una especie de monstruos de los que chorrea sangre fluorescente, así como naves espaciales y todo tipo de efectos especiales. Es decir, algo del otro mundo, como ha sido apellidado el local.