Encarcelados dos 'rockers' como presuntos homicidas del estudiante de Chamberí

Dos jóvenes rockers han ingresado en prisión por orden judicial, acusados de ser los presuntos autores de la muerte de un estudiante y de las lesiones sufridas por un amigo de éste, cuando ambos se hallaban el pasado día 12 a la puerta de un bar de la calle de Andrés Mellado. El crimen hizo que los vecinos del distrito de Chamberí arreciaran en sus críticas contra las autoridades gubernativas y municipales.

José María Hernández Tirado, conocido como Johnny, de 23 años, y José María Martínez Monzón, apodado el Pulgui, de 20, han ingresado en prisión tras ser detenidos por inspectores del Grupo Tercero de la Brigada Judicial de Madrid. Ambos son los presuntos autores de la muerte del estudiante Eduardo Ulloa Parajuá y de las lesiones causadas a su amigo Carlos Crespo Bonachera.

Provocación

Ulloa y Crespo se encontraban el pasado día 12 con otro amigo ala puerta del bar El Boquerón, sito en la esquina de las calles Andrés Mellado y Meléndez Valdés. Se les acercaron varios rockers con el ánimo de provocarles y uno de ellos esgrimió una navaja y exigió a los estudiantes que le dieran el dinero que llevasen.

Johnny ha declarado que vio a tres jóvenes y que "no le gustaron sus caras" por lo que se dirigió hacia ellos con el ánimo de provocarles. Se encaró con Eduardo Ulloa y le asestó un profundo pinchazo cerca de un ojo y otro en el vientre. De forma paralela, el Pulgui acuchilló gravemente a Carlos Crespo tras quitarle un billete de mil pesetas.

La policía inició sus investigaciones y determinó que el grupo agresor podía estar integrado por jóvenes rockers que acuden habitualmente durante los fines de semana al complejo denominado los sótanos de Aurrerá y a otros puntos del distrito de Argüelles.

La mayoría de estas bandas proceden de la zona norte y este de Madrid. "Son grupos violentos y provocativos, que parten de la base de que el fin de semana es suyo", dice el comisario Manuel Prieto Montero, jefe de la Brigada Judicial.

Los encargados del caso investigaron en la calle de Orense, plaza de Chueca, plaza del Dos de Mayo y diversas zonas donde se reúnen jóvenes rockers y otros aficionados al consumo de litronas de cerveza. Los policías trataban de identificar a uno de los criminales, del que sabían que tenía largas patillas.

Los inspectores del Grupo Tercero detuvieron a Johnny cuando entraba el pasado lunes en su domicilio de la calle de Polvoranca, en la localidad madrileña de Alcorcón. Se había dejado la barba para no ser reconocido por sus patillas y dijo que arrojó al rio Manzanares el arma blanca con la que mató a la víctima.

El martes fue capturado el Pulgui cuando se encontraba en el cuartel del paseo de Extremadura, de Madrid, donde actualmente cumplía el servicio militar.

Encubridores

Además de los dos presuntos autores del homicidio del joven Ulloa y de las lesiones graves sufridas por su amigo Crespo, la policía detuvo a otras cinco personas, entre ellas la novia de uno de aquéllos, acusadas de encubrimiento. Tres de ellas tienen antecedentes por tráfico de drogas y otra por encubrimiento del crimen del camarero de una hamburguesería de la calle de Atocha.

Fuentes policiales han expresado su esperanza de que el esclarecimiento de la muerte del estudiante sirva para "serenar los ánimos de los vecinos de la zona", quienes días atrás mostraron su malestar por la "degradación" de Chamberí.

La policía cree que "el palo" infligido a esta banda, que presuntamente dirigía Johnny, hará que los grupos similares se retraigan de acudir a los locales de diversión del complejo Aurrerá.

Por otra parte, continúan las investigaciones para detener a los agresores de Joaquín Rodríguez Ramos, conserje de una finca de la calle de Guzmán el Bueno, que el pasado día 10 murió acuchillado por unos desconocidos.