Tres extranjeros fueron expulsados fuera del plazo legal de detención
Tres ciudadanos extranjeros, dos angoleños y un malí, que se hallaban en España de forma irregular, fueron expulsados de nuestro país fuera del plazo legal, debido a que "provocaron diversos incidentes con la intención de entorpecer" la orden decretada por las autoridades gubernativas, según fuentes de la Dirección de Policía. Un juez de instrucción de Madrid decretó en el caso del ciudadano malí su internamiento en un "centro no penitenciario" por un tiempo máximo de 72 horas, que cumplió en los calabozos policiales.El angoleño Carlos Pedro de Almeida Moreno fue detenido y acusado de carecer de medios lícitos de subsistencia, por lo que la delegada del Gobierno en Madrid, Ana Tutor, ordenó su expulsión del territorio nacional.
Almeida fue embarcado el pasado 25 de octubre en el vuelo 813 de Iberia, que partió del aeropuerto de Barajas con destino a Lisboa, donde al día siguiente estaba previsto introducirle en un avión que le trasladaría a Luanda (Angola), según fuentes policiales.
El también angoleño Rui André dos Santos fue detenido por carecer de permiso de residencia en España. Tras el decreto de expulsión fue trasladado a Lisboa el 26 de octubre.
Incidente
Ambos angoleños coincidieron en la capital portuguesa y, cuando iban a ser introducidos en el avión con destino a Luanda, "organizaron un incidente que motivó que la tripulación del aparato se negase a admitir a tales pasajeros si no iban acompañados de escolta policial" según un portavoz oficial.El 27 de octubre llegaron a Lisboa unos policías españoles que escoltaban a otro expulsado y las autoridades portuguesas les informaron de la situación creada por Almeida y Dos Santos. Los agentes españoles regresaron ese mismo día al aeropuerto de Madrid-Barajas trayendo consigo a estos dos hombres.
La Brigada Provincial de Documentación decidió que fueran expulsados acompañados de policías. Sin embargo, diversas trabas burocráticas hicieron que los angoleños pasaran casi tres días en los calabozos policiales y otro día más en la sala de espera del aeropuerto, hasta ser finalmente embarcados, a media tarde del 31 de octubre, en un avión con destino a Lisboa.
Los dos angoleños y los policías de escolta, según la Dirección General de Policía, llegaron a la capital portuguesa el 31 de octubre, pero tuvieron que permanecer allí hasta el pasado día 4 por no haber vuelo a Luanda.
El tercer extranjero implicado en este caso es Kone Brehima, natural de Mali, que fue detenido en Barcelona, acusado de carecer de medios lícitos de subsistencia. Brehima llegó el 27 de octubre al aeropuerto de Barajas, donde estaba previsto embarcarle al día siguiente en un vuelo de Iberia con destino a Dakar, pero tras la agresión de Brehima a un policía nacional se suspendió su embarque, según fuentes policiales.
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