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El Banesto niega la concesión de créditos a través de sus filiales para la compra de sus propias acciones

Andreu Missé

En las alegaciones presentadas ante el Servicio de Reclamaciones del Banco de España, el Banco Español de Crédito (Banesto) afirma que es cierto que el Banco Garriga Nogués y el Banco de Vitoria concedieron a José Nonay y a la mercantil Nonay Gil Hermanos, SL, una serie de créditos para la financiación de sus actividades.Pero añade que "en garantía de estas operaciones, concedidas por entidades de crédito completamente independientes y con personalidad jurídica propia a la del Banco Español de Crédito, quedaron pignoradas una serie de acciones del Banco Español de Crédito, por lo que el crédito se concedió no para la compra de acciones, sino para hacer frente a una serie de compromisos u obligaciones adquiridas por este grupo farniliar". Sin embargo, esta. versión no coincide con la carta enviada por un directivo del Banesto a Nonay en la que le ofrecía un crédito del Banco Garriga Nogués para la compra de acciones del Banesto (véase EL PAÍS de ayer).

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Por otra parte, el Banesto destaca que en 1984 se plantearon tres procedimientos judiaciales -se refiere a la ejecución de los créditos-, obteniéndose en todos los casos sentencia a favor de las entidades. El Banesto considera muy importante el hecho de que en ninguno de los casos Nonay planteó oposición a las demandas judiciales. Nonay, por su parte, afirma que no presentó alegaciones por carecer de la información en aquel momento.

También señala el banco que en el "transcurso de estos procedimientos el señor Nonay facultó expresamente tanto al Banco Garriga Nogués como al Banco de Vitoria para vender la totalidad de las acciones que se encontraban en garantía de las opraciones crediticias, detalle éste que maliciosamente omite referenciar el señor Nonay en su escrito".

José Nonay aporta una certificación del Banesto que afirma que el 29 de abril de 1982 José Nonay Villaba; su mujer, Palmira Gil, y la hija de ambos, Felisa Nonay Gil, eran propietarios de 1.095.111 acciones que no se encontraban pignoradas. El Banesto advierte que no se dejará intinúdar por la acción de Nonay.

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