Aznar dialoga con los regionalistas para que acudan con AP al Parlamento Europeo

José María Aznar, presidente de Alianza Popular de Castilla y León, está manteniendo conversaciones con destacados representantes del Partido Aragonés Regionalista (PAR), que gobierna la comunidad autónoma de Aragón, y la Unión del Pueblo Navarro (UPN) para propiciar una candidatura conjunta para las elecciones al Parlamento Europeo, previstas para junio de 1989.

Aznar mantiene estos contactos en coordinación con Manuel Fragá, que aspira a ofrecer ante el congreso de AP, convocado para enero, pruebas concretas de su disposición a ampliar la base electoral de AP y a favorecer un entendimiento con grupos de centro derecha. Aznar ha recabado ya la opinión de Hipólito Gómez de las Roces, presidente del Gobierno autónomo de Aragón, y de Ignacio Gómara Granada, presidente del Parlamento de Navarra y dirigente de UPN.Tanto uno como otro se han mostrado "sensibles" a las propuestas de los fraguistas, que si bien han sido genéricas, pretenden la consecución de acuerdos concretos para las elecciones al Parlamento Europeo, según la versión de un destacado dirigente aliancista. Por el contrario, las sugerencias lanzadas a Unión Valenciana han encontrado una respuesta negativa en este grupo, al que los sectores más liberales de AP califican como "otro mundo".

No obstante, los colaboradores de Manuel Fraga prefieren .no quemar etapas con precipitación" y mantener la discreción sobre los contactos con los partidos regionalistas, presumiblemente para favorecer el desarrollo de unas conversaciones difíciles y propiciar la espectacularidad del anuncio del acuerdo, si lo hay.

Los hombres de confianza de Fraga consideran prioritario conseguir el mayor apoyo interno para su candidatura a la presidencia de AP y posponer el reparto de puestos en la lista de comité ejecutivo nacional, encabezada por el eurodiputado.

Apoyo de comités

Según estos medios, han aprobado resoluciones de apoyo al retorno de Fraga los comités ejecutivos provinciales de Soria, Ávila, Tarragona, Alicante, Castellón, Valencia, Valladolid, Granada, Madrid, Segovia, La Rioja, Vizcaya, Murcia, Zamora, Baleares, Barcelona y Huelva, a los que se sumó ayer el de Lérida, según informa Efe. El presidente de la organización aliancista de Málaga también ha apoyado la decisión de Fraga.

Fuentes próximas a éste aseguran que también se han decantado como partidarios del regreso del ex presidente los comités ejecutivos provinciales de Nuevas Generaciones de Soria, Ávila, Tarragona, Alicante, Valladolid, Granada, Segovia, Murcia y Zamora.

Por otra parte, el secretario de organización de AP, Gonzalo Robles, afirmó ayer en un almuerzo en el Club 78 que inicialmente hay "diferencias sustanciales entre el proyecto político de Hernández Mancha y el de Fraga, aunque éste todavía no se conoce en concreto".

Tras sostener que Fraga representa a la derecha y Hernández Mancha pretende congregar al centro derecha, Robles reconoció que es deseable "llegar a un acuerdo sobre un proyecto político" antes del congreso aliancista, lo que facilitaría, agregó, la presentación de una única candidatura. El dirigente aliancista apuntó que en la próxima junta directiva nacional es probable que Hernández Mancha proponga la ampliación del número de compromisarios asistentes al congreso de 1.300 a más de 2.000.

[De su lado, el eurodiputado Fernando Suárez afirmó ayer en León que Manuel Fraga "será presidente de AP mientras él quiera y le apoyen las bases del partido", informa Efé].