Leonid Brezney protegió a los dirigentes uzbekos corruptos
Leonid Breznev, el dirigente soviético fallecido en 1982, protegió a los dirigentes del partido en la República asiática de Uzbekistán a sabiendas de los incriminadores resultados de la investigación interna emprendida contra ellos. El diario gubernamental Izvestia publicó en su edición vespertina del lunes un amplio artículo en el que por primera vez se vincula de forma directa con la corrupción en Asia Central a Breznev y al que fue presidente del Presidium del Soviet Supremo de la URSS Nikolai Podgorni.
El artículo de Izvestia denuncia a Yadgar Nasridinova, una funcionaria que llegó a ser presidenta del Soviet Supremo de Uzbekistán entre 1959 y 1970 y que hoy goza de una lujosa vida como jubilada en Tashkent, la capital de la república.Nasridinova, que en su día fue puesta como ejemplo de las posibilidades de ascenso femenino en la URS S, fue expulsada del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS) en 1976, tras una investigación de] comité de control de¡ partido. Entre los cargos que se le imputaban estaba el haber indultado a varios delincuentes condenados a penas de larga duración. Por los indultos ilegales y por distintos favores, la funcionaria, cuyo expediente ocupa nueve tomos, cobraba distintos sobornos en dinero y en objetos de lujo. La boda de su hijo se convirtió en una fiesta legendaria, cuyos invitados fueron alojados espléndidamente durante semanas en dachas especiales.
Confrontados con las pruebas de la investigación, Breznev y Podgorni salieron en defensa de Nasridinova y consiguieron evitar la expulsión del partido, que quedó convertida en una simple amonestación rigurosa. Breznev se contentó con darle una regañina. "Has hecho una tontería", le dijo como crítica a la fastuosa boda. La bondad de Breznev ,abonó el terreno y creó todas las condiciones para todo el abuso y la corrupción que llevó al estancamiento", afirma el texto.
Izvestia coloca en la misma categoría humana a Breznev, a Podgorni y al ministro del Interior Nikolai Shchelokov, que se suicidó en 1984. El periódico salva, sin embargo, la memoria de Arvid Pelshe, el jefe de la comisión de control del partido desde 1966 hasta su muerte, en 1983. PeIshe, nacido en Letonia, fue el antecesor de Mijail Solomentsev, que ocupó este cargo desde 1983 hasta su reciente cese, a finales de septiembre pasado. Medios comunistas atribuían a Solomentsev las dificultades para procesar a varios altos funcionarios presuntamente implicados en asuntos de corrupción.
Detenciones
Boris Pugo, el funcionario que ha sustituido a Solomentsev al frente de la comisión de control, es tenido por el hijo adoptivo de Pelshe, cuyo nombre es limpiado de toda sospecha por el artículo de Izvestia, que lo presenta indefenso ante la presión de sus colegas en la cúpula soviética.La corrupción en Uzbekistán parece no haber sido erradicada todavía, a juzgar por las detenciones de dirigentes locales; entre ellos, Inamzhon Usmanjodzhaev,jefe máximo de Uzbekistán hasta el pasado enero.
Recientemente, la revista Novedades de Moscú informó del arresto de Usmanjodzhaev y de otros tres funcionarios uzbekos. Dos de ellos, por lo menos, habían sido delegados en la XIX Conferencia del PCUS el pasado junio. Entre los arrestados se encuentra el primer secretario de Bujara, Ismail Dzhabarov, que ocupó el cargo tan sólo en 1984, para sustituir a uno de los principales implicados en la mafia de Sharaf Rashidov, el amigo personal de Breznev que dirigió la república hasta su muerte, en 1983.
La Prensa soviética ha revelado también que el escándalo del algodón (falsificación de datos estadísticos) sigue provocando detenciones en Uzbekistán.
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