El presidente argelino promete los cambios políticos que exige la revuelta

El presidente argelino, Chadli Benyedid, se comprometió ayer a realizar los cambios políticos exigidos por los protagonistas de la revuelta juvenil que desde hace seis días registra el país. Chadli Benyedid se dirigió anoche a la nación, por espacio de 20 minutos, en un discurso por radio y televisión.Benyedid, que presentaba un aspecto apesadumbrado y muy fatigado, dijo: "Prometo que respetaré vuestro deseo de cambios políticos. Efectuaré esos cambios en las próximas semanas. Ahora os pido vuestra ayuda. No personalmente, sino para la salvación de vuestra nación, vuestra revolución y vuestro pueblo". El presidente anunció que se haría un referéndum para aprobar los cambios.

Chadli Benyedid habló en árabe y comenzó con las palabras "en nombre de Dios, el clemente, el misericordioso", pero no hizo referencias posteriores al islam. Reiteró su discurso del pasado 19 de septiembre, en el que denunció el "inmovilismo" de un sector del poder argelino, y efectuó un llamamiento contra los "corruptos", los "burócratas" y los "especuladores". Sin embargo, no anunció medidas concretas.

El discurso del presidente era aguardado con gran expectación por todos los argelinos, consternados por las numerosas víctimas que ha causado la represión de los disturbios juveniles que estallaron la semana pasada en Argel y posteriormente en el resto de las ciudades más importantes del país.

Ayer, pese a los llamamientos a la calma lanzados por los principales líderes religiosos, la sangre volvió a correr por las calles de Argel. Las fuerzas de seguridad reprimieron con disparos de fusiles ametralladores una manifestación de unos 20.000 jóvenes, en su mayoría integristas, y causaron entre 25 y 30 muertos.

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