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Acuerdo para evitar la violencia en Armenia

El Comité Karabaj, que dirige la insurrección armenia, y las autoridades comunistas de Eriván aunaron ayer esfuerzos para evitar una escalada de violencia tras el despliegue de tropas en la capital de la República Soviética de Armenia. Los soldados del Ministerio del Interior seguían limitándose ayer a rodear los edificios oficiales y, aunque un helicóptero sobrevolaba permanentemente la ciudad, los mítines espontáneos y concentraciones en la plaza de la Ópera se desarrollaban sin cortapisas, según afirmó por teléfono a EL PAÍS una residente en Eriván.

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La huelga general seguía en vigor, aunque sólo fuera porque nadie estaba en su puesto de trabajo, sino recorriendo la ciudad de un mitin a otro. Según uno de los líderes independentistas, cinco personas, encabezadas por el miembro del Comité Karabaj Jachut Tambogián, iniciaron una huelga de hambre. La sentada estudiantil frente a las tropas proseguía, tras haber pasado allí toda la noche en silencio, con banderas tricolores independentistas e iluminada por los focos de los blindados.No obstante, los ánimos parecían más calmados después de que a última hora de la noche anterior varios diputados del Soviet Supremo armenio hablaran a las decenas de miles de personas congregadas en la plaza de la Ópera y les convencieran de regresar a sus casas.

Los parlamentarios anunciaron que se había obtenido mayoría de diputados (115 firmas) para convocar una reunión de emergencia del Soviet Supremo, como pedía la multitud. Al mismo tiempo, varias personalidades de la cultura armenia hacían llamamientos a la calma y a la disciplina por la televisión regional, aunque todos sostuvieron que "la lucha armenia seguirá".

Entre ellas, el célebre periodista de Literaturnaya Gazeta Zory Balayán (oriundo de Karabaj), el popular actor Sos Sarkissián (a cuyo nombre se envían los fondos de ayuda a las víctimas de Sumgait y a los armenios de Nagorno-Karabaj), y la poetisa nacional Silva Kaputikián. Ésta advirtió: "Estamos frente a un enemigo muy potente y peligroso, por lo que hemos de ser extremadamente prudentes".

Las posiciones de los manifestantes y del propio Comité Karabaj, que en los días anteriores se habían radicalizado hacia posturas próximas a los independentistas del expulsado Paurir Airikián, también se suavizaron. "Ahora ya nadie habla de un referéndum que decida la independencia, como se demandaba hasta ayer", explicó por teléfono otro militante nacionalista.

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Contagio

En los anteriores mítines en la plaza de la ópera se había defendido la celebración de ese referéndum y hasta la constitución de un "Gobierno provisional armenio" formado por los integrantes del Comité Karabaj, los dirigentes del grupo de Airikián y los diputados armenios que apoyan el miatsúm (reunificación con Nagorno-Karabaj). La ebullición armenia ha coincidido con nuevas manifestaciones nacionalistas en Tblisi, capital de la Georgia soviética, aprovechando la presencia en la ciudad de los delegados de Estados Unidos para un "encuentro de representantes de la opinión pública soviética y norteamericana". Unas 10.000 personas se manifestaron el miércoles y el jueves ante la universidad, la sede del Gobierno y los lugares donde se realizaba el encuentro.Una participante en las manifestaciones, contactada telefónicamente por EL PAÍS, explicó que la milicia actuó violentamente contra los nacionalistas y detuvo durante: algunas horas a una treintena de ellos, incluidos los destacados disidentes Zviad Gamsajurdia, Merab Costava y Gurab Mamulia.

Sin embargo, según la misma fuente, la presencia de norteamericanos y el hecho de que filmaran los incidentes -en los que se rompió una de las cámaras- provocó la intervención de las autoridades regionales.

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