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Grupos de jóvenes hacían cola en una casa para comprar droga

La policía ha desmantelado un piso del barrio madrileño de San Blas en el que un grupo de traficantes se dedicaba a vender heroína a pequeña escala. La vivienda era frecuentada por numerosos drogadictos, que incluso llegaban en determinadas horas a hacer cola en el portal de la finca y en el colindante, según fuentes policiales.

La Sección de Estupefacientes de la Brigada Judicial de Madrid ha detenido a tres personas que presuntamente se dedicaban a la venta (le heroína en el domicilio de una de ellas, situado en la finca número 6 de la calle de Masilla. Se trata de María de las Mercedes Roldán Sáez, de 31 años; su hermano Jesús, de 42 y Amparo Calleja Martínez: de 40 años, esposa de éste.A mediados de este mes, gracias a la colaboración ciudadana, la policía supo que los inquilinos de la citada vivienda suministraban droga a toxicómanos del barrio. Los agentes identificaron a la propietaria de la casa y al matrimonio que permanecía en ella durante todo el día.

Los clientes llamaban al portero automático y preguntaban por Jesús. Al responder éste, los visitantes indicaban que iban de parte de determinadas personas, pero la. mayoría de ellos solicitaba claramente la. droga que precisaban. "La afluencia llegó a ser tal en algunos momentos", según la policía, "que se formaban filas en el portal y en. el contiguo".

Los policías interceptaron a seis jóvenes que salían de la vivienda y vieron que cada uno de ellos llevaba una o dos papelinas, que dijeron haberlas comprado en el improvisado supermercado de la droga.

Alguna persona debió avisar a los inquilinos y cuando los agentes entraron en el piso únicamente hallaron envoltorios vacíos. No obstante, se encontró una libreta con anotaciones que parecen confirmar la existencia del tráfico.

Mientras se efectuaba el registro policial, acudieron cuatro compradores, "uno de los cuales manifestó espontáneamente", según la policía, "que estaba con un fuerte síndrome de abstinencia e iba a comprar droga".

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María de las Mercedes Roldán tenía un antecedente policial por robo con violencia, mientras que los otros dos detenidos carecían de ellos. Los tres niegan los hechos que se les imputan.

'Correo' nigeriano

Por otra parte, Willix Chidi, nigeriano (le 26 años, fue detenido en el aeropuerto de Barajas, donde se descubrió que transportaba en su intestino 57 bolas de heroína, lo que equivale a unas 55.000 dosis de dicha sustancia.Chidi llegó a Madrid en un vuelo procedente de Lagos, con destino a Roma. El funcionario encargado de realizar los trámites de entrada en nuestro país advirtió que su pasaporte presentaba señales de que el visado estaba falsificado, por lo que procedió a la detención del correo (traficante).

Cuando el nigeriano fue sometido a una exploración a través de rayos X, la policía vio que albergaba en su Intestino envoltorios hechos con, preservativos.

El detenido fue trasladado al hospital Gregorio Marañón, donde fue sometido a un tratamiento médico y arrojó las bolas de heroína, que pesaban en total unos 600 gramos. El sistema empledo por Chidi para pasar las mercancía es utilizado con mucha frecuencia por traficantes procedentes de algunos países africanos, según fuentes policiales.

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