Los dueños impiden el desmantelamiento de terrazas en El Pardo

Los propietarios y empleados de las terrazas de El Pardo, acompañados de numerosos vecinos, impidieron ayer que funcionarios del Ayuntamiento de Madrid, apoyados por más de una docena de coches de la Policía Municipal, desmantelaran sus instalaciones. Para ello bloquearon con mesas y sillas la avenida de la Guardia, donde están ubicadas.En un ambiente de gran tensión, los afectados aseguraron que convertir las actuales terrazas de los restaurantes en quioscos de bebidas, como exige el Ayuntamiento, provocaría un sustancial cambio de clientela. "Dejaría de venir gente tranquila para cenar y se llenaría esto de porreros y litronas", según el propietario Rafael Menéndez.

Por ello estiman que el Ayuntamiento no debería aplicar la misma normativa a la llamada costa de la Castellana y a El Pardo, a lo que el concejal del área de Coordinación y Participación, Saturnino Zapata, se niega. Al término de una reunión con el Ayuntamiento, el empresario Eloy Lorden declaró: "No nos queda más remedio que comprometernos a hacer los quioscos".