_
_
_
_

¿Qué tiene que ver el sexo?

El sexo ha sido siempre un tema delicado entre los cristianos, aunque les es difícil explicar por qué. Ello debe remontarse de alguna forma hasta Adán y Eva; sin embargo, Dios maldijo a nuestros antepasados primates no por una clara falta sexual, sino por una desobediencia al comer del "árbol de la Ciencia del Bien y del Mal". Mientras los Diez Mandamientos prohibían el adulterio, Dios impuso a la Humanidad ser fértil y multiplicarse dentro del matrimonio. Entonces, ¿cómo algunos maestros cristianos -al revés que sus colegas judíos que encuentran la procreación una bendición no problemática- llegan a ver la sexualidad como una necesidad desagradable? Elaine Pagels, profesora de la universidad de Princeton, señala estas cuestiones en su nuevo libro Adán, Eva y la Serpiente. Los primeros siglos después de Cristo, asegura, no fueron una edad de oro para la cristiandad, sino una babel de herejías y ortodoxias a las que San Agustín hizo acallar. "La óptica pesimista de San Agustín sobre la sexualidad, la política y la naturaleza humana se convirtió en la influencia dominante en la Cristiandad occidental", escribe, y coloreó toda la cultura occidental, cristiana o no, desde entonces". Antes de Agustín, argumenta Pagels, el Génesis se leía como una promesa de libertad no sólo en cuanto a la voluntad, sino a la libertad política. ¿Por qué los creados a imagen y semejanza de Dios debían servir a los tiranos en la tierra?26 de junio

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_