"Pinochet significa el caos", afirma el socialista Núñez

Unidos en torno a una sola palabra, no, todos los partidos de oposición al régimen militar chileno libran una desigual batalla para vencer al casi seguro candidato gubernamental en el plebiscito presidencial, el general Augusto Pinochet. Ricardo Núñez, máximo dirigente del Partido Socialista de Chile -el sector renovado, separado de los socialistas de Clodomiro Almeyda-, ha discutido en Madrid con los socialistas españoles lo que él califica como "el desafío más importante de los últimos años en Chile".

La oposición chilena ha conseguido hace un mes uno de sus principales objetivos al inicio de la campaña: superar los seis millones de inscritos en el censo electoral. Ahora espera acercarse a los siete millones, con lo que se conseguiría reducir al mínimo el abstencionismo, la indiferencia y las posibilidades de fraude.Núñez, sin embargo, está preocupado por la avalancha de propaganda con que el régimen militar está presionando a los chilenos y hace un llamamiento al apoyo internacional "que tan generosamente ha respaldado la lucha del pueblo chileno por su libertad".

P. Las encuestas muestran que el régimen y la oposición tienen cada uno cerca de un tercio de las preferencia, con una leve ventaja del no, y otro tercio está indeciso. ¿Cree que en esas condiciones la oposición pueda ganar?

R. La mayoría de los indecisos teme a la incertidumbre y, por eso, Pinochet tiende a identificar oposición con caos. Pero nuestro mensaje es que la permanencia de Pinochet por otros ocho años es lo que sería el caos, la polarización. Los chilenos sabemos, tras 15 años de dictadura, que Pinochet no es orden ni paz.

P. ¿Que pasará en la noche del plebiscito si gana el no?

R. Si se llega al plebiscito en condiciones que ofrezcan una mínima garantía ganará el no, saldremos ordenada y responsablemente a las calles a proclamar nuestro triunfo y se iniciará de inmediato un diálogo con las Fuerzas Armadas para concordar un proceso rápido y ordenado para la transición.

P. ¿Y si ganara el sí?

R. Tendríamos que aceptar la voluntad del pueblo, porque somos demócratas. Pero, insisto, sólo en el caso de que se cumplan las garantías mínimas y que ese hipotético triunfo sea comprobado por nosotros.

P. ¿Cómo se ha preparado la oposición para enfrentar el fraude que denuncia?

R. El régimen ya está cometiendo fraude, al no permitirnos acceso a la televisión, al detener a los que hacen campaña por el no, al mantener el estado de emergencia. Pero estamos montando una estructura nacional de apoderados que, al menos, evite el fraude masivo el día de la votación.

P. ¿Cómo valora la reciente decisión del partido comunista de sumarse al no?

R. Positivamente, tal como lo haríamos con los sectores de la derecha que hicieran lo mismo. Sin embargo, no concordamos con algunos puntos de su documento. Ellos plantean que el triunfo del no sea defendido en las calles por un movimiento que desemboque en una sublevación nacional, con un contenido de ruptura no concertada que rechazamos.