_
_
_
_
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Y yo, ¿dónde me meto?

Concluyo que soy un híbrido de tipo. No encajo ni de coña en ninguno de los cuatro prototipos de individuos urbanos españoles de hoy establecidos por El PaísPasa a la página siguiente

Viene de la página anterior

Semanal en su número del 5 de junio. Sé por qué: no tengo un duro. Espartanamente entonces, y con un emorándum de usos y costumbres muy ecléctico, ocurre que mi mejor corbata es tan lucida como las de un Mario Conde, aunque no sea una Christian Dior. Me encantaría ver publicada esta carta al director como si de la misiva de un vulgar sociata se tratase.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Me gustaría sentarme en una butaca diseñada por Le Corbusier (por Mariscal, no, que muerde), y cuando pueda, me compro una cadena hi-fi Mitsubishi con compact disc. Progre (sin ex), desde que me separé le atizo al whisky con asiduidad y, en efecto, estoy jodido.

Beso la mano de las casadas y, sobre todo, de las solteras, pero siempre orino en el water; así, nunca presidiré el consejo de administración de un banco. Procuro no resultar hortera, pero odio las cazadoras de cuero, aunque tal fobia me cueste el perder siempre las elecciones. Sueño con Italia y Kim Bassinger y no marco mal el fox-trot, pero la diseñomanía me parece un síntoma de mediocridad ambiental. Me preocupa la calvicie, gasto barba residual, guardo un poema en el cajón; ¿soy un ex progre? El Guernica sigue en la pared...

Y no, no veraneo ni en Palma, ni en Ibiza, ni en Marraquech, ni en ningún lugar exótico. A mi servicio no tengo ni filipinas con cofia ni asistentas que me tuteen. Como de lo que hay, leo lo que puedo en rústica, hojeo y ojeo diarios y magazines, pero no les hago un puñetero caso. De verdad, visto barata e híbridamente porque, de verdad, no tengo dónde caerme muerto. A ver si se creen ustedes, los de EL PAÍS, que cualquiera puede comprarse una Burberrys, o unos, Camper, o un Adolfo Do mínguez, o un Chevignon. ¡Ah! Y antes muerto que afiliarme a Alianza Popular... o al PSOE. Yo, radical.

No, qué va, por más que lo intento no logro integrarme en ninguno de los cuatro sectores de españoles de 40. También sé por qué: tengo 25 y soy gallego. Y bromeo. Ni caso.-

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_