Conflictos entre directivos de TVE por falta de definición de funciones

Radiotelevisión Española espera aún la aprobación del nuevo organigrama de la casa, pese a su anunciada puesta en marcha desde poco tiempo después de la llegada del equipo dirigido por Pilar Miró. La situación actual se caracteriza por la falta de exacta definición entre las funciones de diversos directivos, por lo que es habitual que se produzcan conflictos que suelen ser zanjados desde lo más alto de la cúpula del poder, la dirección general. El ejemplo más claro de la situación se encuentra en TVE, donde la falta de clarificación de funciones ha creado en los últimos meses diversos enfrentamientos entre mandos de diversos departamentos.

Pilar Miró accedió a la dirección general de RTVE el 17 de octubre de 1986. Poco tiempo después se produjeron los primeros nombramientos de su equipo, que se enmarcaban en un nuevo organigrama que se consideraba como transitorio a la espera de la aprobación del definitivo. En el caso más conflictivo, el de TVE, la idea de esta estructura era la de separar al mismo nivel jerárquico en tres grandes áreas independientes -al contrario de lo que ocurre en las principales televisiones del mundo- los informativos, los programas y la producción de estos últimos. Otras tres grandes áreas (los deportes las producciones externas y los programas con vistas a 1992) tenían sus responsables autónomos respecto de lo anteriormente citado. La situación se complicó en mayor medida con el nombramiento hace unos meses de un coordinador para temas musicales y un encargado del look de la continuidad, que también gozan de autonomía en su trabajo.Según diversas fuentes directivas de la casa, el origen de los primeros conflictos, derivados de la aplicación de este organigrama, tuvieron como denominador común la peculiar manera de entender el ejercicio de la función de directora general por parte de Pilar Miró, en comparación a sus predecesores en el puesto, que han asumido funciones más gerenciales, desvinculadas del puro ejercicio profesional. Su directa participación en la toma de decisiones relacionadas con el área de programación se vio favorecida al no cubrirse en una primera etapa el puesto de director de programas, que de hecho ha desempeñado la propia Pilar Miró.

Desde hace poco más de un mes, TVE ha creado el denominado Comité de Programas, que pretende superar algunos de los inconvenientes derivados de la falta de definición que se crean en la actualidad en determinadas áreas de la casa. Las reuniones se celebran todas las mañanas de los martes, presididas por Pilar Miró. En estas sesiones, directores de distintos niveles discuten para resolver sobre cuestiones que se mueven en campos de cruce de intereses. Además de Pilar Miró y dos de sus más inmediatos colaboradores (Jesús Martín, director de TVE, y Samuel Ortega, director comercial de RTVE), participa el pleno de los hombres fuertes de TVE: Julio de Benito, director de los servicios informativos; Antonio Abellán, director de programas; Pedro Amalio López, director adjunto de programas; Antonio Pozueco, director de producciones externas; Carlos Orengo, director de producción, y Luis Sánchez Enciso, director de programas deportivos y V Centenario. La misma denominación de estos cargos ya presenta algunas interferencias. Cada uno de estos directivos ha creado además, dentro de su área, su propio organigrama, lo que dificulta más aún las relaciones interdepartamentales.