Sesión equilibrada y con poco interés

Los mercados, a la vista de los acontecimientos más recientes, optaron por cerrar la semana sin pronunciarse sobre la evolución de las cotizaciones a corto plazo. Dinero y papel volvieron a mantener cierto equilibrio, que sólo se rompió en aquellas ocasiones en las que había plusvalías acumuladas. Los comentarios del día se centraban en la evidencia de la falta de fuerza del mercado para aprovechar las buenas noticias que la semana ha proporcionado. Aunque el papel no presionaba demasiado, el ambiente resultó apagado y llevó a un cierre en el que destacaba el potencial vendedor.Los corros fueron un pulso constante entre un papel -que no quería perder posiciones y un dinero que esperaba cualquier recorte para tantear el terreno. En algunos casos el dinero se mostraba muy por debajo de la posición del mercado, sin que el papel fuese lo suficientemente importante como para llegar a esos niveles. Esto dio como resultado una serie de ausencias que, unidas alas suspensiones de contratación, dejan fuera del mercado algo más de un 2051. de la ponderación del índice.

Unas cuantas subidas estratégicas proporcionaron la base de un mercado equilibrado en el que el sector bancario iba a empujar en sentido alcista. El predominio del papel entre los valores de primera fila de este sector no fue, una vez más, obstáculo para que se impusieran las subidas. Tres repeticiones y tres alzas de cinco enteros fueron el resultado de un resto vendedor de 21.000 títulos para los seis grandes que aún contratan.

Las posiciones al cierre tenían como nota más destacada la ausencia de movimientos importantes, debido a la falta de expectativas para la semana próxima. No obstante, la demanda era escasa y era atendida con una prontitud que mostraba la existencia de papel para la mayoría de los grupos.