El viaducto de Riaño, abierto ayer al tráfico, facilita el aceso a 30 pueblos
El viaducto de Riaño, que facilita notablemente las comunicaciones de la zona, fue abierto ayer al tráfico de vehículos, así como varios tramos de las variantes que discurren desde el muro de la presa hasta el nuevo poblado y la carretera comarcal 635 (Palencia-Riaño). Esta ruta enlaza con Asturias por el puerto de Tarna, en los alrededores de Burón, uno de los nueve pueblos afectados por el embalse.
En los próximos meses de verano está previsto que se concluyan las obras de la vía que va del nuevo Riaño a Boca de Huérgano, necesaria por quedar bajo las aguas parte de la antigua nacional 621 (León-Santander). La totalidad de las variantes de las antiguas carreteras tienen una extensión de 33 kilómetros.
Los trabajos de construcción del viaducto de Riaño fueron paralizados en noviembre de 1986 debido a un interdicto de obra nueva promovido por un grupo de 17 vecinos de la citada localidad. Cinco meses más tarde la Audiencia Provincial de León autorizó la obra al considerar incorrecto el procedimiento interdictal para suspender una obra pública.
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