El temporal de la heroína

En otras zonas semiurbanas de Galicia, la heroína ha comenzado a golpear con una brutalidad inusual para este tipo de estratos sociales. En el caso de la península del Morrazo, muy cerca de la propia ciudad de Vigo, está considerada como uno de los principales centros de consumo de droga de la provincia. En más de la mitad de los hogares de la comarca el padre está ausente del domicilio familiar la mayor parte del año, trabajando en la marina mercante, lo que es interpretado en fuentes oficiales como causa determinante del inusual índice de toxicomanía.Situación parecida se vive en la ría de Arosa, donde hay municipios que apenas rebasan los 10.000 habitantes, como el de Vilanova, en el que hay censados oficialmente unos treinta heroinómanos. En este caso la explicación es más sencilla, pues se trata del centro de operaciones del contrabando reconvertido, en parte, a la droga.

El Gobierno Civil reconoce que las aprehensiones de tabaco rubio han descendido, pero asegura que la droga es más utilizada para enviar a otras zonas de España que para vender en la propia provincia. La intensificación de la vigilancia en la ría de Arosa ha desplazado el contrabando hacia otras zonas de Galicia. El pasado año se halló un espectacular alijo de hachís al sur de Pontevedra, y otro de casi una tonelada en la costa de la muerte, en La Coruña.