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Don Juan Carlos se declara convencido de que la Expo 92 será un éxito

Los Reyes de España visitaron ayer en Sevilla el estado de las obras del recinto de La Cartuja, en donde quedará ubicada en 1992 la Exposición Universal. La presencia junto a don Juan Carlos y doña Sofía del vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, y de tres de sus ministros pone de relieve el carácter solemne de esta visita, que medios políticos y económicos interpretan como el comienzo de una etapa de reactivación del proyecto Expo 92. El propio Rey se mostró convencido de que la Expo, 92 será un "éxito del que se beneficiarán Andalucía y, particularmente la ciudad de Sevilla.

La presencia en Sevilla de los Reyes, que llegaron en la tarde anterior, ha sido recibida con entusiasmo por los sectores políticos y socioeconómicos de la ciudad, que consideran que el aval de la Corona ya constituye un síntoma claro de que el proyecto llamado a ser la operación política, económica y de proyección exterior más importante de la democracia española, según fuentes oficiales- es irreversible.Don Juan Carlos y doña Sofía fueron recibidos, a pie de obra, por los principales responsables de la Expo 92, el comisario Manuel Olivencia y el consejero delegado de la Sociedad Estatal, Jacinto Pellón, así como por el séquito gubernamental, integrado por Guerra y los titulares de Relaciones con las Cortes, Obras Públicas y Transportes. También estaba presente el secretario de Estado para la Cooperación, Luis Yáñez.

La visita red se inició en el complejo de Las Caracolas, el cuartel general prefabricado, desde donde Jacinto Pellón, el hombre que Felipe González desplazó hace un año a Sevilla para poner técnicamente el proyecto en marcha, coordina y dirige los trabajos.

Los Reyes, siguiendo las explicaciones del director de la División de Proyectos y Construcción, Ginés Aparicio, fueron informados de las obras actuales de ingeniería, infraestructura y pavimentación de accesos.

Aparicio explicó a los Reyes el nacimiento de la Expo desde un territorio de más de dos millones de metros cuadrados que milagrosamente ha llegado a nuestros días como espacio natural, con excepción del viejo monasterio de Santa María de las Cuevas, actualmente en fase de restauración, y la fábrica de cerámica y loza anexa, fundada en 1841 por la familia Pickman, tras la desamortización de Mendizábal.

En el interior del monasterio, proyectado como pabellón real de la Expo 92, don Juan Carlos y doña Sofía fueron informados de su historia y de la función que desempeñará en el futuro.

Los responsables de la exposición, entre ellos el arquitecto José María Benjumea, hicieron hincapié en sus explicaciones ante los Reyes, del carácter colombino del lugar, ya que en el monasterio residió Cristóbal Colón antes de emprender la aventura del Descubrimiento y estuvo enterrado en él durante 27 años.

Tras hacer un recorrido posterior en helicóptero por todo el recinto, para conocer a vista de pájaro el desarrollo global de las obras, los Reyes se trasladaron al Casino de la Exposición de Sevilla, uno de los majestuosos edificios del conjunto- monumental de 1929, para visitar Expo-informa, una muestra de lo que se pretende hacer en Sevilla en 1992 y que tendrá carácter intinerante,

Junto a las autoridades políticas, recibieron a los Reyes en el Casino los presidentes del Banco de Bilbao-Vizcaya, José Antonio Sánchez Asiaín y Pedro Toledo, y de Sevillana de Electricidad, Fernando de Ibarra, patrocinadores de la muestra que depende de la división cultural.

Terminada la visita, los Reyes presidieron una reunión del Alto Patronato para la Conmemoración del V Centenario del Descubrimiento, que la Corona tiene intención de celebrar en una próxima edición en el Parque Nacional de Doñana, y asistieron a un almuerzo en los Reales Alcázares. Por la tarde, don Juan Carlos y doña Sofía ofrecieron una recepción a las autoridades y a la comunidad sevillana relacionada con la Expo92.

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