Una obra importante
Arrepentimiento (1984), más que una película buena o una película mala, es una película importante. Además, no debe considerarse una obra aislada, puesto que es la última pieza de una trilogía que su realizador, Tenguiz Abuladze, georgiano, realizó en el ya lejano 1968 y cuya película central, El árbol de los deseos, de 1976, era excelente, superior a ésta de ahora que ha batido todos los récords de taquilla en la URSS.Lo más importante de Arrepentimiento es que, por fin, rompe con la línea oficial a que se ha visto expuesto el cine soviético durante lustros. Es crítica, extremadamente crítica, con los sistemas autoritarios. Una sátira más o menos feroz a las dictaduras a través de una historia larga que ha de quedar necesariamente para estudiosos de esa cinematografía.
Arrepentimiento se emite hoy a las 22
10 por TVE-2.
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