La guerra de las ciudades

THE GUARDIAN

La vuelta a una escalada sin precedentes en la guerra de las ciudades entre Irán e Irak es un recordatorio importante de que la cuestión palestina no es la única crisis existente en Oriente Próximo. La intensificación de la guerra del Golfo está claramente activada por Irak, que inició la última escalada con un ataque aéreo el sábado pasado. Irán respondió el fin de semana con un ataque de la artillería en Basora y en otras ciudades de la frontera de Irak, más otro de sus intermitentes ataques con misiles a Bagdad. Como represalia por la venganza, Irak reveló la existencia de sus nuevas reservas de misiles balísticos al disparar más de una docena de éstos contra Teherán en los últimos días.Ahora que Irak ha tenido éxito en su dramático intento de dirigir de nuevo la atención mundial hacia la guerra del Golfo en su octavo año de existencia, ¿adónde nos conduce esto? La respuesta de Irán, una advertencia a los ciudadanos de Bagdad para que se refugien en los lugares sagrados mientras se produce la terrible revancha, era totalmente predecible. Dada la capacidad de precisión de los misiles iranies, Bagdad ha de estar muy bien advertida.

La provocación que supone el nuevo bombardeo de Irak refleja dos cosas: la confianza que tiene de poder resistir aún, y el deseo de restablecer la intervención intemacional que comenzó con la prometedora resolución 598 del Consejo de Seguridad de la ONU del año pasado.

2 de marzo