Rodríguez de la Borbolla se rodea de hombres de confianza y releva al único guerrista de su Gobierno

El presidente de la Junta de Andalucía, José Rodríguez de la Borbolla, procedió ayer a un reajuste de su Gobierno que afecta a cinco consejerías, que pasan a ser ocupadas por hombres de su máxima confianza. En el reajuste sólo salen del Ejecutivo regional dos personas: el hasta ayer consejero de Economía y Fomento, José Aureliano Recio, que anunció a principios de febrero su intención de abandonar la política, y el titular de Gobernación, Enrique Linde, el único miembro del Gabinete andaluz próximo al vicepresidente del Gobierno central, Alfonso Guerra.

La crisis, que medios guerristas sitúan como "una fuga hacia adelante", se produce a tres semanas del congreso regional del partido, al que concurren dos facciones enfrentadas -borbollistas y, guerristas-, y en el curso del cual el presidente de la Junta será, con toda probabilidad, desposeído de la secretaría general del socialismo andaluz, que rige desde 1977.El reajuste tiene lugar también a sólo unos días de la celebración en el Parlamento andaluz del debate sobre el estado de la región, promovido por el propío presidente.

Rodríguez de la Borbolla, a quien se le considera en medios políticos dentro "de una soledad política" similar a la que en su día soportó el segundo presidente andaluz, Rafael Escuredo, ya que los ocho congresos provinciales le han situado en minoría, ha nombrado consejero de la Presidencia a su lugarteniente en los últimos tiempos, Gaspar Zanías, secretario de organización del PSOE regional. del PSOE regional.

Zarrías, madrileño de 32 años, sustituye a otro borbollista, Manuel Gracia Navarro, que ahora se hace cargo de la cartera de Gobernación. Precisamente esta última consejería, primer cargo público que tuvo Rodríguez de la Borbolla en el Ejecutivo regional, la dirigía el destituído Enrique Linde, ex director general de Política Interior en los primeros años de gestión de José Barrionuevo y malagueño como el guerrista Carlos Sanjuán, a cuya carrera política dentro del socialismo andaluz está unido.

Sanjuán es uno de los más firmas candidatos a ocupar la secretaría general del PSOE andaluz en su próximo congreso, en sustitución de Rodríguez de la Borbolla.

A Linde se le sitúa en medios socialistas como el probable número dos de Sanjuán, concretamente en la vicesecretaría regional, cargo vacante desde la salida de José Miguel Salinas, que dimitió de sus funciones para competir con el alcalde comunista de Córdoba, Herminio Trigo, en las últimas elecciones municipales.

En cuanto a José Aureliano Recio -considerado más un técnico que un cargo de confianza-, su dimisión estaba cantada, ya que ha sido tentado por la empresa privada, de la que procede. Recio, colaborador de Ramón Rubial cuando este ocupaba la presidencia del extinto Consejo General Vasco, tiene una oferta del Banco de Vizcaya, como miembro del equipo de expertos que debe dirigir la fusión de éste con el Banco de Bilbao. El ex consejero de Economía y Fomento andaluz mantiene estrechas relaciones con Pedro de Toledo, presidente del Vizcaya.

Tres borbollistas

Los otros tres borbollistas que cierran esta crisis son Ángel Ojeda, a quien se le adjudica la nueva cartera de Hacienda y Planificación; José María Romero, que asume Fomento y Trabajo, y Eduardo Rejón, nuevo consejero de Salud y Servicios Sociales. Rodríguez de la Borbolla, al crear estas tres carteras, lo que ha hecho es simplificar en ellas cuatro ya existentes -Economía. y Fomento, Hacienda, Trabajo y Bienestar Social, Salud- y repartir sus competencias, como son los casos de Planificación Económica, que dependía de la ahora extinguida cartera de Economía, que pasa a Hacienda; o Consumo, que la absorbe Salud y Servicios Sociales. El Instituto de Fomento Andaluz (IFA), órganismo autónomo encargado de apoyar económicamente la creación de empresas en Andalucía, pasa a Trabajo.Rodríguez de la Borbolla, que considera que esta crisis aporta "impulsos renovados" a los dos años que faltan para agotar la legislatura, no ha tocado carteras nunca bien vistas por los guerristas; como la de Cultura, en la que se mantiene Javier Torres Vela, y tampoce, ha propiciado la salida de hombres como Manuel Gracia, lo que hubiera sido aplaudido por éstos. Gracia, no obstante, ha sido elevado en sus funciones al acceder a la primera consejería, según el protocolo.

El presidente, antes de dar a conocer el resultado de la crisis, se reunió con la ejecutiva regional del PSOE, que, según él, "se mostró solidaria". La ejecutiva socialista regional está controlada, al menos hasta el próximo congreso regional, por Zarrías, nuevo consejero de la Presidencia.

Rodríguez de la Borbolla, al dar a conocer ayer la composición de su nuevo Gobierno, indicó: "El resultado del congreso va a ser positivo y, al final, la inmensa mayoría de los socialistas estarán conmigo". Y añadió que "la remodelación es una decisión a favor del trabajo común y no va contra nadie".

Por su parte, otras fuentes socialistas prefirieron no hacer comentarios sobre la crisis, que situaron como un asunto de competencia exclusiva del presidente y actual secretario regional, y prefirieron esperar un tiempo para hacer una valoración general, no de la decisión de Borbolla, sino de la gestión del Gobierno que preside. No obstante, desde sectores del PSOE andaluz contrarios a la gestión del presidente se transmitió ayer cierta extrañeza ante el marcado caracter monocolor de su Gobierno, cuando en el congreso regional se perfila un cambio en profundidad de la dirección del partido.