El logotipo de Barcelona 92 es parecido a otro registrado en Valencia
La Generalitat valenciana solicitó a principios del pasado mes de noviembre la inscripción del logotipo de su parque tecnológico en el Registro de la Propiedad Industrial. El diseño, presentado para su inscripción en el registro 15 días antes que el de los Juegos Olímpicos de Barcelona, ofrece una gran similitud con éste. El hecho ha sido calificado por el conseller de Industria y Comercio del gobierno valenciano, Andrés García Reche, como "una coincidencia".El diseño inscrito por la Generalitat valenciana es obra del equipo La Nave, de Valencia, y se ha inspirado en las pinturas rupestres de la Valltorta, en Castellón. Los tres trazos del dibujo resultan muy similares a los que figuran en el logotipo de Barcelona 92, elaborado por José María Trías e inspirado en los trazos y colores de la pintura de Joan Miró. Los dos diseños difieren en el color. Mientras el de Trías está realizado en rojo, amarillo y azul, el del grupo La Nave está realizado todo en negro.
García Reche, ha explicado a este diario que, al ver publicado el logotipo de Barcelona, su departamento hizo una consulta con la agencia que está gestionando la inscripción del emblema del parque tecnológico. El hecho de que el logotipo de la Barcelona olímpica tenga un alcance internacional permitirá que salga a exposición pública, siguiendo un trámite de urgencia, antes que el diseño valenciano.
Sin embargo, la diferencia de colores y de algunos detalles del diseño, así como del alcance del registro solicitado, no generan ningún problema, en opinión del Gobierno valenciano, que no tiene intención de plantear ninguna reclamación y sólo pretende, en palabras de García Reche, "hacer constar que el logotipo del parque tecnológico se ha presentado en el registro con anterioridad al de Barcelona". Por otro lado, un estudio realizado por el Centro de Estudios y Asesoramiento Metalúrgico (CEAM) afirma que la organización de los Juegos Olímpicos de Barcelona generará inversiones por valor de más de un billón de pesetas. El estudio ha sido dirigido por Francesc Santacana, decano del Colegio de Economistas de Cataluña.
