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Industria dedicará 10.300 millones a fomentar la calidad y el diseño en la pequeña industria manufacturera

Rosa Cullell

El Ministerio de Industria ha elaborado el Plan de Promoción de Calidad, Diseño y Moda para la Pequeña Industria Manufacturera. Al igual que se hiciera anteriormente en el sector textil y de la confección para impulsar la moda de España, Industria realizará desde este año hasta 1991 diversas inversiones para promocionar aspectos intangibles en el sector de la piel (calzado, peletería, marroquinería, curtidos...), la bisutería, el juguete, el mueble y la cerámica. Las inversiones institucionales se elevarán a 5.246 millones de pesetas en el sector de la piel, a 1.174 millones en la industria de bisutería, a 1.265 millones en la del juguete, a 1.800 millones en el mueble y a 815 millones en el área de pavimentos y revestimientos cerámicos. Las ayudas totales rondarán los 10.300 millones de pesetas.

El nuevo plan de promoción de los famosos intangibles (concepto con el que se califica a las actividades de moda y diseño en la industria) se dirige a sectores donde predominan las pequeñas empresas, con pocos empleados y, en general, muy localizadas en un área de la geografía española. El plan cuatrienal tiene entre sus objetivos mejorar el nivel tecnológico de estas pequeñas compañías, además de incorporar a sus producciones "unos mayores componentes de calidad y diseño".Al poner en marcha el nuevo programa, la Administración española ha tenido en cuenta el endurecimiento de los mercados y la creciente competitividad de algunos países con mano de obra más barata y fuertes ventajas en la producción, como varias naciones del sureste asiático (Corea o Taiwan). Este aumento de la competitividad exterior ha ido unido, al mismo tiempo, a la liberalización del comercio exterior, que ha provocado un fuerte aumento de las importaciones españolas. Así, en las industrias manufactureras tradicionales las importaciones durante 1986 se incrementaron en más de un 30% en relación a 1985, mientras que las exportaciones sólo aumentaron en un 6%. Y el consumo intemo creció menos del 1%.

La inclusión en el plan de la industria de la piel se debe a sus especiales características. Más del 75% del empleo de este sector, que reúne a calzado, peletería, marroquinería y curtidos, corresponde a empresas de menos de 20 trabajadores. Son industrias intensivas en mano de obra, ya que el número de trabajadores empleados en 1986 superaba los 80.000. El valor de su producción ascendía en ese año a 670.000 millones de pesetas, sus exportaciones superaban los 200.000 núBones y las importaciones alcanzaban los 40.000.

Perder competitividad

Pero el sector de la piel está perdiendo competitividad. A pesar de que los subsectores de esta índustria tienen problemas específicos, los objetivos son los mismos. Se trata de mejorar la calidad y el nivel creativo de susproductos, y conseguir, a través de la promoción de su imagen, una mayor presencia del calzado o la peletería española en los mercados nacional e internacional.

El plan del sector de la piel tendrá dos direcciones. Por un lado, se potenciarán las actividades de promoción de intangibles a través de asociaciones y agrupaciones de empresas (intangibles colectivos). Estas actuaciones conjuntas pueden concretarse en la puesta en marcha de servicios comunes, como gabinetes de estudio; realización de cursos de formación para empresarios; contratación colectiva de diseñadores y creadores; o creación y difusión de marcas conjuntas. Por otro lado, están los intangibles institucionales, los apoyos que prestará la Administración.

Las inversiones institucionales para promocionar la industria de la piel serán este año de 970 millones de pesetas, que se aumentarán hasta 1.375, 1.473 y 1.423 en los tres ejercicios siguientes. Estas inversiones se dedicarán a promocionar ferias, a realizar campañas de publicidad institucionales, a conceder becas para formación de diseñadores o a crear centros de tendencias sobre moda, entre otros aspectos.

El programa de promoción de activos intangibles en la industria bisutera, que reúne a 202 empresas con una plantilla media de 20 trabajadores, tiene en cuenta el elevado potencial de crecimiento de este área económica. Así, las exportaciones españolas de bisutería se han multiplicado por cinco en los tres últimos años y han llegado a alcanzar una cifra de casi 3.000 millones de pesetas.

Pero la Administración considera que, debido a la entrada de España en la Comunidad Europea (CE) y al salto cualitativo en diseño y moda de los productos elaborados en el sureste asiático, han aumentado los riesgos de pérdida de cuota de mercado de esta industria española. Por ello, el programa para fomentar los intangibles de la bisutería contará con unas inversiones institucionales de 1.174 millones.

Jugar a crear

También el juguete, con 300 empresas registradas en 1986 y concentrada esencialmente en la Comunidad Valenciana (60%) y Cataluña (30%), entrará en el nuevo plan de Industria. Dentro de su programa particular se contempla, entre otras cosas, la creación de un Centro de Estudios de Diseño y Tendencias, así como la puesta en marcha de un Día del Juguete, similar al ya existente Día del Libro. Las inversiones de la Administración en este sector serán de 1165 millones.

Las 14.000 empresas dedicadas al mueble en España, que emplean a 116.000 trabajadores, también se beneficiarán del plan cuatrienal. Esta industria, cuya producción en 1986 ascendió a 385.000 millones de pesetas, absorberá inversiones por valor de 1.800 millones hasta 1991.

La moda de la cerámica

Además del plan de promoción del diseño en los sectores de la piel, la bisutería, el juguete y el mueble, el Ministerio de Industria ha puesto en marcha un programa de promoción de activos intangibles en el área de los pavimentos y revestimientos cerámicos. Este programa contará con unas inversiones desde 1988 a 1991 de 815 millones de pesetas.

La decisión de iniciar un programa para aumentar la calidad y el diseño de las cerámicas españolas se debe, según el plan elaborado por Industria, a que este sector, de fuerte tradición exportadora, necesita en estos momentos dotarse "de una infraestructura tecnológica y de diseño propia y de vanguardia, que confiera a sus productos un alto valor añadido tanto en calidad como en creatividad". Hasta ahora, el sector ha dependido, casi totalmente, de la tecnología y el diseño italiano.

Asimismo, la necesidad de que los pavimentos y revestimientos cerámicos españoles aumenten su calidad se debe al cambio registrado por los mercados a los que dirige sus productos. Mientras en el pasado el principal mercado de la cerámica española eran los países árabes, en estos momentos la producción se dirige cada día más a Europa, Estados Unidos y Canadá, cuyos consumidores exigen un nivel más depurado.

El sector de pavimentos y revestimientos cerámicos está representado por 196 empresas, de las que 156 se encuentran en la Comunidad Valenciana (el 80% del total). Otras dos zonas con tradición en el sector son Cataluña y Andalucía. Los puestos de trabajo directos que ofrece la industria ceramista se elevan a 11.900.

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