Una divisa con forma de cajetilla blanca
., Tiene que ser Kent, una cajetilla blanca (mejor que dorada) y largo. Con ello se abren las puertas en este país de empedernidos fumadores. Muchos rumanos, sin embargo, no se lo fuman. El paquete de Kent sirve como divisa propia en un mercado que los propios rumanos han creado dentro de esta economía rígidamente planificada.
Con un paquete de Kent se puede coger un taxi por la calle, acelerar trámites o incluso, ya con cartones, comprar a un sastre un traje hecho a medida. Los médicos, que no necesitan realmente muchos más ingresos en moneda local para comprar lo que necesitan (generalmente en el mercado negro), prefieren que los extranjeros les paguen con Kent.
Las razones de que los rumanos hayan convertido el Kent en divisa para el mercado negro de productos y servicios puede explicarse en el hecho de que la posesión de divisas extranjeras -dólares, marcos, francos y otras- por parte de los particulares está terminantemente prohibida. El mercado negro se ha tenido que desarrollar sobre otras bases.
Un paquete de Kent viene a costar 1,4 dólares en las tiendas para extranjeros, lo que en moneda local, al cambio oficial, equivaldría a unos 10 lei. Con un paquete de Kent se puede conseguir 10 veces más.
La gente ya no recuerda por qué Kent ha quedado como la marca favorita. "Para fumar, yo incluso prefiero otras marcas, como Benson and Hedges", señala Alexandru Gherasim, de la oficina de turismo de Brasov. Algunos, sin embargo, señalan que el Kent cobró su valor de divisa negra a raíz de la ayuda estadounidense tras el terremoto de 1977. Pero quién sabe. El caso es que con la penuria alimentaria, de calefacción y de luz a la gente le ha dado por fumar más. Los nervios, debe ser.
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