La sociedad Konak toma el control del 72 % del capital de Tagra

La sociedad Konak se ha hecho con el 72% del capital de Tagra, SA, dedicada a la fabricación de antenas parabólicas. Konak ha pagado el precio simbólico de una peseta por el paquete de acciones, cuyo valor nominal es de 82,8 millones, y se ha comprometido con los antiguos propietarios y actuales socios minoritarios, la familia Grau, a aportar un mínimo de 66 millones de pesetas en una ampliación de capital que elevará el mismo a 230 millones.

La empresa adquirida por Konak tiene su sede en Badalona y se dedicaa la producción de equipos de telecomunicaciones, centrando su actividad en la fabricación de antenas parabólicas, para la que se espera un sustancial incremento de la demanda y disminución de precios en los próximos años.Tagra, cuyas deudas rondan los 300 millones, atraviesa graves problemas financieros. La empresa dice contar, sin embargo, con un alto nivel de pedidos y la tecnología más avanzada de Europa en el terreno de las parabólicas, con una cuota de mercado en los países comunitarios. que roza el 50%. Tagra tiene dos filiales, Tagra Francia, SA, y Tagra Túnez, SA, dedicadas a la venta en el extranjero, y una tercera sociedad, Aligator, SA, poseedora de la tecnología. Las tres firmas han sido incluidas en el acuerdo de venta. La plantilla es de 270 empleados más 35 vendedores exclusivos y su facturación anual ronda los 1.500 millones de pesetas. Los nuevos propietarios esperan incrementar la facturación en un 40%, como mínimo, en 1988, y dan por seguro que el cash-flow será positivo en dicho ejercicio.

El acuerdo entre Konak y los hermanos Grau tiene una cláusula suspensiva, que condiciona la validez del contrato al cumplimiento, en el plazo de tres meses, de diversas ayudas por parte de la Administración que ya se estaban negociando antes del cambio accionarial.

Las ayudas

Dichas ayudas son, fundamentalmente, la aportación de 49 millones de pesetas, vía ampliación de capital, por la Sociedad Catalana de Capital Riesgo; una subvención por importe de 90 millones por parte de la Dirección General de Electrónica e Informática del Ministerio de Industria; la recepción de un crédito de 100 millones con un tipo de interés preferencial, y el aplazamiento de la deuda de Tagra con Hacienda y la Seguridad Social. Los nuevos propietarios también consideran indispensable un acuerdo con los trabajadores que garantice el cumplimiento del plan de viabilidad de Tagra, en vigor desde hace un par de años.Fuentes de Konak señalaron que el aplazamiento de las deudas institucionales ya se ha conseguido, formalizándose nuevos plazos que alcanzan los cinco años con los seis primeros meses de carencia. Añadieron que tanto el Ministerio de Industria como la Generalitat se han mostrado dispuestos a colaborar en el reflotamiento de la empresa. Fuentes de la Generalitat confirmaron su ínterés en Tagra. El comité de empresa también ha expresado su disposición a negociar un acuerdo a largo plazo.

Konak, SA, que inició sus contactos con Tagra el pasado mes de agosto, está participada por seis profesionales -tres ingenieros, dos abogados y un economista- unidos especialmente para el proyecto de Tagra. Según un portavoz de Konak, no representan a ningún grupo financiero o industrial ni tienen pensado vender la empresa de telecomunicaciones tras un primer saneamiento.