Juicio a Els Joglars por blasfemia y escarnio a la religión
El grupo teatral catalán Els Joglars, con su director Albert Boadella al frente, acude de nuevo, el jueves, a los tribunales. El juicio, en esta ocasión, se debe a una querella contra todos y cada uno de los miembros del grupo, por blasfemia y escarnio a la religión. La denuncia fue presentada en Burgos por Juan Riu, abogado y miembro de la Adoración Nocturna (asociación católica), después de que el grupo actuara en aquella ciudad con el montaje Teledeum, el pasado año.En torno a la obra Teledeum, el grupo teatral ha sufrido tres procesos. Uno en Jerez de la Frontera, que no llegó a juicio, por desestimarse la denuncia de unos bodegueros por blasfemia y escarnio a la religión. En Valencia tuvieron un juicio por delitos contra la libertad de conciencia y blasfesmia. Una vez absueltos, la acusación representada por el abogado Carlos Verdú Moscardó, a instancias del arzobispo de Valencia, recurrió al Supremo, donde está el proceso pendiente de resolución.
La acusación particular pide un total de seis meses para cada miembro del grupo y 33 pesetas de multa por dos delitos de blasfemia y uno de escarnio.
Albert Boadella declaró ayer que el caso recuerda viejos juicios de la historia de la libertad de expresión: "Se trata de un juicio con olor, todavía, inquisitorial. Es un juicio retro. Sinos condenasen, tal y como sospechamos, produciría una sensación de desamparo jurídico, puesto que nos encontramos que por el mismo caso la Audiencia de Valencia le da el sobreseimiento".