FECSA saneará su balance en millones con la venta de Copisa a Dumez
Fuerzas Eléctricas de Cataluña (FECSA) logrará una mejora de su balance patrimonial por un valor de unos 3.000 millones de pesetas con la venta de las acciones de su participada Constructora Pirenaica, SA (Copisa), al grupo constructor francés Dumez, SA. Los directivos de ambas compañías han llegado a un principio de acuerdo que se materializará, una vez haya sido aprobado por los respectivos consejos de administración, en un contrato de opción de compra que se firmará el próximo 25 de noviembre. La venta se formalizará el día 15 de diciembre.
Durante las últimas semanas, FECSA mantuvo también negociaciones con un grupo alemán y un grupo español, integrado por una constructora y una de las principales empresas de montaje, que no prosperaron al presentar ofertas inferiores a las de Dumez.El grupo, Dumez se hará cargo de las deudas de Copisa, que ascienden a 2.435 millones de pesetas, de los cuales 750 millones están avalados por FECSA, y pagará entre 500 y 600 millones de pesetas por las acciones de la constructora, según fuentes de la eléctrica.
Dumez, SA es uno de los tres principales grupos constructores franceses y en 1986 declaró unas ventas de 350.000 millones de pesetas. El grupo está integrado por Dumez Travaux Public, Dumez Bátiments, Dumez Afrique, Dumez USA y Dumez Constructions Incorporated. A su vez, cada una de estas sociedades cuenta con importantes filiales. Entre las actividades de Dumez destaca la participación en la construcción del túnel del canal de La Mancha.
Copisa, especializada en la construcción de centrales hidráulicas, térmicas y nucleares, y otros trabajos relacionados con el sector eléctrico -trabaja sobre todo para FECSA- tiene un capital social de 400 millones de pesetas y en su balance, a finales de 1986, figuraban unas reservas de 1.417 millones de pesetas. La empresa es propiedad de FECSA en un 88,73% y de Sociedad Productora de Fuerzas Motrices, (SPFM), cuyas acciones pertenecen en un 100% a la eléctrica. Copisa ha registrado un cierto declive en su actividad en los últimos tiempos. Así, mientras en los años 1984 y 1985 logró una facturación superior a los 10.000 millones de pesetas en cada ejercicio, en 1986 las ventas cayeron hasta los 7.814 millones de pesetas, según fuentes de la empresa.
Condiciones contractuaIes
Entre las condiciones contractuales destaca el compromiso de Dumez de mantener el empleo actual de 539 personas con la inclusión de una cláusula que establece expresamente la prohibición de presentar expedientes de regulación de empleo durante los próximos tres o cuatro años (pendiente todavía de concreción). En este sentido, la empresa que preside Luis Magaña ha mostrado especial interés en formalizar la operación a través de una venta de las acciones y no de la sociedad, lo que implica una mayor garantía para la futura vida de la sociedad.Por otra parte, FECSA se compromete a mantener el actual mercado cautivo de que disponía Copisa (construcción de zanjas, mantenimiento y demás obras) durante varios años. Para ello se han estipulado claúsulas de daños y perjuicios que obligan a FECSA a pagar una elevada indemnización en caso de incumplimiento de este compromiso.
Además de la oferta económica concreta, la propuesta de Dumez fue bien recibida por tratarse de un grupo con proyectos de imlantación en España y, por tanto, con interés en mantener y ampliar la actividad de Copisa.
Estas cautelas de FECSA no han bastado, sin embargo, para convencer a los trabajadores de la constructora, que ayer se concentraron de nuevo ante la sede de la empresa para exigir el mantenimiento de los puestos de trabajo y fueron agredidos por los guardias de seguridad, según CC OO
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