El retroceso del dólar en todos los mercados arrastró a las bolsas internacionales a una caída generalizada

La crisis que afecta a todas las bolsas de valores mundiales entró ayer en su décimo día con retrocesos espectaculares, sobre todo en París, y con los operadores cada vez más inclinados a pensar que la economía mundial ha entrado en una "espiral infernal" cuyo fin y consecuencias nadie puede prever. Las bolsas europeas se mostraron ayer completamente entregadas a la suerte fatal del dólar, cuya caída produjo notables efectos "devastadores".Los mercados se abrieron en Europa dentro del clima de pesimismo impuesto por la pérdida en Tokio de 257,43 yenes en el índice Nikkei. En efecto, París perdió el 9,21%, mientras el índice Financial Times cedía en Londres 33,5 puntos para cerrar a 1.288,5, Bruselas retrocedía un 7%, Francfort, muy afectada por la caída del dólar por debajo del índice psicológico de los l,75 marcos, perdía 89,3 puntos en el índice Commerzbank, que quedó en 1.496,9 puntos, y el índice general de las bolsas suizas descendía 50 puntos, situándose en 847,5.

La esperanza de Wall Street

A última hora de la tarde de ayer una corriente de esperanza Regaba de Wall Street donde, en medio de una gran incertidumbre, el índice Dow Jones experimenté un alza de 3,32 puntos para cerrar a 1.848,80 en un clima muy activo. Wall Street logró revertir por la tarde la tendencia a la baja gracias al nuevo clima creado por la masiva intervención de la Reserva Federal en apoyo del dólar.En París, los valores bursátiles franceses entraron en una caída libre, la mayor de los últimos años, con algunas centésimas más todavía de pérdida que en el primer lunes negro, el pasado 19 de octubre. La jornada empezó con una baja del 3,5% en el mercado continuo, que se convirtió en una pendiente vertiginosa hasta llegar al 9,79% de baja poco antes del cierre, 0,09% más que el 19 de octubre, informa Lluís Bassets desde París. Quince valores de primera fila sufrieron un drenaje del 20% y cinco más de liquidación mensual tuvieron que suspender la cotización durante toda la jornada.

La de Londres conoció una tónica similar, al seguir los pasos de Tokio y Hong Kong y en medio del temor a la creciente debilidad del dólar. El Gobierno británico sigue sometido a fuertes presiones para que cancele la privatización de British Petroleum (BP), informa Ricardo M. de Rituerto desde Londres.

El mercado de valores londinense volvió a reincidir en la tónica vendedora y si sólo cerró con una pérdida de 44,9 puntos fue porque a media tarde inició unarecuperación desde más abajo de los 100 en que se encontraba a las tres de la tarde, después de la progresiva caída que había mantenido hasta entonces y que le había llevado más allá del índice 1600 por primera vez desde hace un año. En París, las sociedades recientemente privatizadas se vieron especialmente afectadas, hundiéndose todavía algunos puntos más en valores inferiores a sus valores de venta al público. Saint-Gobain, la sociedad estrella de las privatizaciones, que había alcanzado el precio de 524 francos pocos meses después de su venta a 310 francos, se vendía ayer a 408. Los títulos del grupo bancario Paribas, vendidos al público a 405 francos, se cotizaban a 346. Los de Sogenal, a 128 francos, siete puntos por debajo del precio inicial. CCF igualaba su valor inicial de 107 francos, lejos ya de los 153 francos de cotización máxima alcanzado después de la privatización.