Una vida programada
La vida de los ajedrecistas durante un Campeonato del Mundo está regulada hasta en los más mínimos detalles. Andrew Page, apoderado de Kasparov, ha contado cómo es la del campeón.Kasparov se levanta mientras dura el torneo a las diez de la mañana, algo más tarde que de costumbre, para desayunar cereales, carne con pan, yogur de frutas y café. A continuación, da instrucciones a los analistas para indicarles en qué deben ocuparse en tanto él juega al tenis de once y media a una de la tarde. Después, si es día de partida, vuelve a encerrarse con ellos para preparar la táctica a seguir. De lo contrario, se echa la siesta hasta las dos y media, hora en que come a base de sopa, un plato de carne con vegetales y helado; para beber, agua tónica. Sigue un rato de reposo para la digestión. Hacia las cuatro, se traslada a jugar contra Karpov o, en caso de que ese día no haya partida, se reúne con su equipo para trabajar durante cinco horas consecutivas. Tras una cena ligera, generalmente pescado, un poco de evasión por medio de vídeos que no exijan demasiados esfuerzos intelectuales.
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