El PSOE reconoce que se ha producido "clientelismo y oligarquización" en el seno del partido

La ponencia política que debatirá el 31º Congreso Federal del PSOE, previsto para el próximo mes de enero, afirma que los socialistas han mantenido en los últimos años una actitud de prudencia y responsabilidad, pero reconoce que "ello no obsta para que se hayan producido en el seno del partido fenómenos de clientelismo y de oligarquización". Los autores del documento, cuya redacción definitiva será aprobada a principios de octubre por el Comité Federal del PSOE, resaltan que la actividad de los sindicatos está siendo más reivindicativa frente al Estado que frente a los empresarios.

La ponencia política, que será distribuida a partir del mes de octubre entre la militancia socialista como eje del debate que tendrá lugar en el próximo congreso federal, no recoge ninguna propuesta que signifique transformar en Estado federal el Estado de las autonomías establecido en la Constitución.Las alusiones a la política autonómica parten de un anunciado propósito de "continuar, con más impulso, el proceso de reforma y modernización de todas las administraciones". Los dirigentes socialistas encargados de la redacción de la ponencia defienden como objetivos para los próximos años el consolidar el Estado de las autonomías y posibilitar "el pleno desarrollo de sus potencialidades".

Al concretar los criterios que deben presidir la actuación de los gobernantes, el PSOE considera preferente la "simplificación, descentralización, funcionalidad para el ciudadano y la austeridad en el gasto", entre otros.

Se trata, en definitiva, según los autores de la ponencia, de "lograr la funcionalidad normal y cotidiana de la forma de Estado que hemos puesto en marcha". Una aseveración que abunda en las recientes declaraciones de altos cargos nacionales del PSOE que adelantaron serias reticencias a introducir cambios que supongan la modificación de previsiones constitucionales, incluidas las contenidas en los estatutos de autonomía.

En el ámbito socioeconómico, el documento que centrará los debates del 31º Congreso Federal del PSOE propone como objetivos prioritarios el incremento del empleo y garantizar "la igualdad de oportunidades". A lo largo del extenso texto se pormenorizan las reflexiones sobre la necesidad de "incrementar la riqueza" -en referencia al producto interior bruto-, "trabajar con eficacia" y "organizar la solidaridad en la sociedad", entre otras.

Actitud dialogante

Para alcanzar los objetivos fijados, el PSOE reconoce que debe gobernar de una forma dialogante, advertencia que no figuró en la ponencia política debatida en el congreso federal anterior. "La definición de los objetivos y prioridades se realizarán más razonablemente si se avanza a través del diálogo y la concertación", advierten los ponentes.

Tras afirmar que los socialistas han mantenido una actitud muy responsable en los últimos años, el documento reconoce que "ello no obsta para que se hayan producido en el seno del partido fenómenos de clientelismo y oligarquización". "El partido", se dice más adelante, "no es patrimonio de sus dirigentes, ni siquiera de sus militantes, sino del pueblo español".

En una reflexión sobre el papel que corresponde al sector público y al privado en una economía en crisis y necesitada de solidaridad social, los dirigentes socialistas defienden que .es falso que la salud del mercado aumente en la medida que el Estado reduce su acción". Asimismo sostienen que el Estado no puede declinar la responsabilidad de prestar servicios a quienes carecerían de ellos por falta de recursos propios, y aseguran que debe aumentar la igualdad de oportunidades entre los españoles.

En un libro presentado el pasado martes en Madrid y que recoge el debate celebrado hace un año en Jávea (Alicante) sobre El futuro del socialismo, Alfonso Guerra invitó a los socialistas a defender al Estado "sin complejos", porque "si no lo defienden los socialistas no lo hará nadie".

La reforma de los estatutos federales del partido propuesta por la comisión redactora de la ponencia política no incluye la creación de la figura del "coordinador general", que antes del verano defendió algún dirigente, y aboga por el funcionamiento de "gabinetes de relación con la sociedad".

La ponencia -elaborada por José Rodríguez de la Borbolla, José María Maravall, Txiki Benegas, Alejandro Cercas, Francisco Fernández Marugán, Juan Manuel Eguiagaray, Ramón Vargas Machuca y Antonio García Miralles- será presentada hoy.