AP sugiere un pacto para anticipar las elecciones gallegas y evitar la moción de censura contra Fernández Albor

El Comité Ejecutivo nacional de Alianza Popular ratificó ayer su apoyo a Gerardo Fernández Albor como presidente de la Xunta ante el anuncio realizado por los dirigentes del PSOE de Galicia de que van a presentar de forma inminente -probablemente hoy- una moción de censura en el Parlamento contra el Gobierno autónomo. El secretario general de AP, Arturo García Tizón, manifestó ayer que consideraría como una "ruptura de los esquemas de juego democrático" que los socialistas gallegos lleguen a contar con los votos de el ex dirigente aliancista José Luis Barreiro.

García Tizón propuso al PSG-PSOE que "si quieren encontrar una salida a la situación que aprueben el proyecto de ley que permitiría al presidente de la Xunta disolver el Parlamento y convocar elecciones anticipadas". El dirigente de AP matizó que no es propósito de la dirección de Alianza Popular anticipar la convocatoria de unas elecciones autonómicas en Galicia, pero adelantó su disposición a negociar una propuesta de estas características si es presentada como tal por los socialistas gallegos. Fernández Albor se encuentra en estos momentos sin margen de maniobra ante el acoso de la oposición ya que carece de competencias para convocar elecciones antes del término de la legislatura.El comité ejecutivo nacional de Alianza Popular juzgó ayer como una indignidad el que el PSOE se avenga a utilizar los votos de los barreiristas, para acceder al Gobierno de Galicia porque califican al ex secretario general de AP de Galicia y a los diputados autonómicos que le han seguido como "unos traidores". Un destacado miembro de la dirección nacional de AP manifestó ayer a este diario que si el PSOE triunfa en su anunciada moción de censura gracias al apoyo de José Luis Barreiro y sus seguidores los gobernantes socialistas en diversas instituciones municipales y autonómicas, especialmente el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid, pagarían las consecuencias y se encontrarían con una beligerante oposición de AP.

[Mientras, el vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, declaró ayer en Madrid que la situación del Gobierno gallego es "insostenible" y que "lo importante es acabar con la ineficacia del Gobierno de Fernández Albor, que es absoluta", informa Europa Press. Guerra agregó que Fernández Albor ,,está en las antípodas de lo que debe ser un responsable político, y si la moción de censura no triunfa será al menos una llamada general para la conciencia de Galicia".]

Contactos en Santiago

La moción de censura contra el Gobierno de Fernández Albor que, con toda probabilidad, presentará hoy el PSOE quizás será debatida en el Parlamento gallego la próxima semana. Los socialistas, según informa desde Santiago de Compostela Xosé Hermida, iniciaron ayer las negociaciones con las otras fuerzas de la oposición y mantuvieron los primeros contactos formales con Coalición Galega, el grupo que tiene la llave de la mayoría parlamentaria, y el Partido Nacionalista Galego (PNG), que ya ha anunciado su apoyo incondicional a la iniciativa. Por otra parte, Gerardo Fernández Albor rompió ayer su silencio para reiterar que nunca presentará su dimisión.La atención de las negociaciones, que continuarán durante los próximos días, se centrará en la posibilidad de que los socialistas logren un acuerdo con Coalición Galega, ya que, sin los votos de esta fuerza política (10 escaños), el candidato del PSOE, Fernando González Laxe, nunca conseguiría ser elegido presidente. González Laxe necesita 36 votos y tiene 30 asegurados: los 22 de su grupo, 5 del Partido Nacionalista Galego y los 3 del Partido Socialista Galego-Esquerda Galeda (PSG-EG). Estos dos últimos partidos ya han anunciado que apoyarán incondicionalmente la moción. El PSG-EG, sin embargo, no quiere participar en el hipotético Gobierno de coalición.

En las filas socialistas existe optimismo ante la posibilidad del pacto con Coalición Galega, y desde el principio los dirigentes del PSOE han reiterado su convicción en que González Laxe va a ser el nuevo presidente de la Xunta. El secretario general del PSG-PSOE, Antolín Sánchez Presedo, insiste en que las negociaciones deben ser algo más que un "reparto del botín", pero aun así la oferta socialista a CG será sumamente generosa: al menos tres consejerías; otra cartera podría quedar reservada también para el PNG. Este optimismo socialista contrasta con el desánimo que se percibe en las filas aliancistas, acrecentado tras el anuncio de Coalición Galega de que no está dispuesta a apoyar al Gobierno de Fernández Albor, que dispone así de 30 votos en el Parlamento autónomo.

Coalición Galega se ve en una situación similar a la que vivió después de las autonómicas de 1985, cuando debía elegir entre dejar la iniciativa de gobierno a los populares o sumar sus votos a los del PSOE. En aquella ocasión, el proceso le costó a CG la escisión de los hombres de González Mariñas, partidario de un pacto con los socialistas. Ahora la unidad de criterio no es mayor.

De hecho ayer se produjo una nueva dimisión en el partido. Según informa Ernesto S. Pombo, el ex presidente de Coalición Galega (CG), Antonio Díaz Fuentes, ha presentado su dimisión como miembro de la ejecutiva del partido en desacuerdo con el reciente ingreso del mismo de Barreiro.