Popper y el bipartidismo

A sus 85 años, sir Karl R. Popper continúa llamando la atención con sus curiosas argumentaciones. En su artículo sobre Apuntes a la teoría de la democracia, recogido en EL PAÍS del 8 de agosto, Popper aborda de nuevo un tema que resulta muy oportuno en la situación actual de la democracia española: ¿bi o pluripartidismo? A mí me ha recordado el capítulo que formaba parte del libro que publiqué hace 20 años -Una democracia para España, Edicusa, 1967, páginas 74-92-, dedicado a proponer un sistema electoral ventajoso, tal como yo lo veía entonces, que era de un modo algo semejante al de Popper, aunque no igual. Sin embargo, en esos 20 años han pasado muchas cosas y el aumento de experiencia me ha hecho rectificar aquellas opiniones, que hoy me parecen equivocadas. Popper, en cambio, piensa úhora igual que hace cuarenta y tantos años. .El argumento popperiano consiste en recordarnos lo que todos sabemos, que la democracia es el peor de los regímenes, con excepción de los demás; y, a partir de esta perogrullada, monta el siguiente razonamiento: "Todos los sistemas electorales son malos; el proporcional tiene tales y tales inconvenientes; por tanto, el mayoritario es el menos inalo". Pero se le ha olvidado fijarse en los inconvenientes del mayoritario, que, acaso, podrían ser peores -por lo menos en algunos países- Popper dice que "ninguna forma de gobierno es buena, o segura o está libre de corrupción", añadiendó en seguida que "una forma que posibilite el sistema bipartidista es la mejor forma de democracia". Aquí no ha recordado la otra frase célebre, según la cual el poder corrompe, y el poder absoluto corrompe absolutamente. Por tanto, como en la democracl a el poder lo da la mayoría, resulta que en la democracia la mayoría corrompe, y la mayoría absoluta corrompe absolutamente. Y no hay bipartidismo sin mayoría absoluta.-