La terrorista de ETA Militar Lucía Urigoitia fue enterrada tras un homenaje popular
El dirigente de Herri Batasuna (HB) Tasio Erkizia afirmó ayer en Otxandio (Vizcaya) que Lucía Urigoitia ha sido víctima de "un vil asesinato, un crimen de Estado". Erkizia hizo estas manifestaciones durante el acto político de homenaje a la activista de la organización terrorista ETA, celebrado por la tarde con participación de unas 1.500 personas, antes del entierro de la joven. Con anterioridad se había celebrado en la iglesia parroquial un funeral de cuerpo presente al que asistieron los familiares de la fallecida y varios centenares de personas.
El cadáver de Lucía Urigoitia llegó a su pueblo natal a las seis y media la tarde. El féretro fue custodiado por vehículos de la Guardia Civil desde San Sebastián hasta las cercanías de Otxandio. La Guardia Civil instaló controles en las carreteras de acceso a la pequeña localidad, aunque no hizo acto de presencia durante los actos.Una tanqueta de las Unidades Antiterroristas Rurales (UAR) sufrió un grave accidente al romper un petril en el puerto de Urquiola y estuvo a punto de precipitarse al vacío. Fuentes del cuerpo indicaron que no se produjeron heridos.
Varios centenares de personas con ikurriñas recibieron el féretro en las calles de Otxandio, con vivas a la organización terrorista ETA Militar y gritos de "el pueblo no perdona".
El cadáver de Lucía Urigoitia fue trasladado hasta la iglesia parroquial, donde tres sacerdotes concelebraron en euskera el funeral. Por deseo de la familia, el féretro no fue cubierto con la bandera vasca ni con ningún otro símbolo. En la homilía, uno de los sacerdotes dijo que nunca se puede aceptar la muerte violenta y que no existen razones políticas ni sociales para justificarla y pidió que la muerte de Urigoitia sea interpretada como una llamada a la paz.
Símbolos de ETA
Terminado el oficio religioso, el féretro fue conducido a la plaza, cubierto con la bandera vasca y una pancarta con el hacha y la serpiente, símbolos de ETA Militar, con el lema Bietan jarrai (Seguir adelante). Tasio Erkizia, de la Mesa Nacional de HB, aseguró en su intervención que Urigoitia fue "asesinada a sangre fría, cuando la tenían detenida, y con el aplauso complaciente del gobernador de Guipúzcoa, Goñi Tirapu, y, del portavoz del Gobierno, Javier Solana".
"En cualquier país que se llame democrático", añadió el dirigente de HB, "una acción tan salvaje llevaría al castigo y a la dimisión no sólo de los ejecutores directos sino de los responsables políticos, desde el gobernador de Guipúzcoa hasta el presidente del Gobierno".
Según Erkizia, las condiciones en que se produjo la muerte de la activista de ETA "explican los ataques de Goñi Tirapu contra los jueces, porque no le preocupa que fueran a Intxaurrondo, sino el informe sobre esa muerte". En el acto intervinieron bertsolaris que improvisaron estrofas de homenaje a la activista de ETA muerta.
Dirigentes de HB
Varios dirigentes de la coalición abertzale Herri Batasuna acudieron a la localidad vizcaína para participar en el homenaje a Lucía Urigoitia, que se desarrolló bajo una llovizna intermitente. Entre otros, se encontraban presentes Jon Idígoras, ltzíar Aizpurúa y Jokin Gorostidi, además del alcalde de Llodio, Pablo Gorostiaga.
También asistieron al funeral religioso Sabin Zubiri, de Eusko Alkartasuna, y Roberto Lertxundi, de Euskadiko Ezkerra, partido al que representa en el Ayuntamiento de Otxandio un hermano de la activista fallecida.
